Una vez más, las puertas de la Casa Hermandad del Rocío de Isla Cristina se abrieron para, a las doce de la noche, cantar la Salve al Simpecado. Pero esta vez fue distinto porque aunque resulta muy hermoso escuchar las palabras con las que se alaba a la Madre de Dios, si algo caracteriza al mundo rociero es, sin duda alguna, el toque de la flauta y el tamboril y, en este caso, de las manos de José Manuel Clemente, tamborilero de la Hermandad del Rocío de Sant Antonio de Portmany (Ibiza) aún más al ser un joven que además de su sabiduría, le pone un corazón enorme lleno de amor hacia la Virgen del Rocío. Y así fue como interpretó la conocida Salve de Manuel Pareja Obregón para seguirle, ya sólo con la flauta y acompañado a la guitarra por David Soto, con un variado grupo de sevillanas de verdadera oración a la Madre de los Rocieros.

Fría la noche, como son las noches de invierno, pero con el calor humano que rodea nuestra Casa cada vez que nos congregamos en ella para la Salve y que hace que sigamos siendo una Hermandad viva.

PEREGRINACIÓN

Si hermoso estaba el día, más hermosa si cabe aún estaba la Hermandad cuando se acercó hasta el Santuario de la Virgen del Rocío para celebrar su Peregrinación Oficial, porque la Madre de los Rocieros sonreía, sin duda, viendo entrar a Isla Cristina entera hasta llegar a sus plantas y ante laaclamación de todos los feligreses.

Un fin de semana lleno de alegría y fervorosa fe rociera el que se vivió en la Aldea hasta culminar el domingo con la celebración de la Eucaristía presidida por nuestro Director Espiritual, Carlos Javier Rodríguez Parra que, con sus palabras, llegó profundamente a los corazones de todos los hermanos y hermanas, no sólo de nuestra Hermandad sino también de todos los hermanos de otras Hermandades rocieras que quisieron acompañarnos en ese día tan hermoso, especialmente nuestra querida Hermandad del Rocío de Medina del Campo, Hermandadades de Penitencia y Gloria de nuestro pueblo, Asociación de la Bella y Hermandad de la Bella de Lepe y, desde luego, el Presidente del Consejo de Hermandades Antonio Peña y la Alcaldesa de Isla Cristina María Luísa Faneca .

Desde estas páginas queremos dar las ¡¡GRACIAS!! a la Hermandad Matríz por el abrazo fraterno con el que nos recibió y con el cariño que nos demostró porque ellos saben, ¡y bien que lo saben!, que nuestro amor por la Virgen del Rocío, por la Patrona de Almonte, es totalmente incondicional y que por Ella siempre lucharemos para que la Hermandad de Isla Cristina esté donde le corresponde. Tamibén ¡GRACIAS! al párroco de Almonte por las hermosas palabras con las que nos despidió.

Desde estas líneas, la Hermana Mayor, Carmen Prieto y la Junta de Gobierno de la Hermandad con su Presidente Pedro Jesús Álvarez a la cabeza, quieren dar las gracias a todos y todas los que nos acompañaron en ese día en el que, sin duda, Isla Cristina entera se iluminó por el abrazo recibida por la Madre de Dios.