El Grupo Gallardo insiste una y otra vez en la falta de voluntad política que hay para que su proyecto de la Refinería en el sur de Badajoz, que llevaría consigo el atravesar de Sur a Norte la provincia de Huelva con un aleoducto, salga adelante.
Después de años de espera a que los gobiernos de Madrid, Mérida y Sevilla, los tres socialistas, dieran luz verde al proyecto, se encuentran con que las muchas ‘inversiones’ que han tenido que realizar para desbloquear la iniciativa no les han valido de nada. Y para colmo se huelen que después del cambio de Gobierno en Extremadura en favor del PP, pero con IU a la expectativa, y los previsibles cambios en Madrid y Sevilla, todos sus esfuerzos podrían no sirvirles de nada. De ahí la prisa que tienen en que se desbloquee cuanto antes el estudio de impacto ambiental por parte del Ministerio que dirige Rosa Aguilar.
Resortes periodísticos no le faltan a este grupo, que ha entendido que una fórmula ideal para desbloquear el proyecto de la Refinería era invertir en medios de comunicación, por ruinosos que estos fueran, pero con vinculaciones con el poder político; eso, además de ‘invertir’ en imagen en otros medios, por rivales que estos pudieran ser. El caso es acallar o minimizar las voces de los ecologistas, cuya negativa al proyecto es rotunda por el impacto que se temen tendrá tanto en el parque Nacional de Doñana como en otros espacios naturales de la provincia de Huelva, así como en la propia zona en la que irá la refinería, en territorio extremeño.
