Mariscadores de la costa occidental se han manifestado este viernes por las calles de Huelva acompañados por sus mujeres e hijos para pedir que les dejen coger coquinas en las playas de Doñana. Aseguran que están «pasando hambre» porque el resto del caladero onubense “está esquilmado”.

La situación de las 78 familias afectadas por esta situación es “crítica”. Así lo ha aseverado el presidente de la Asociación de Mariscadores Nueva Umbría, Antonio Márquez, quien ha reclamado a la Junta “una solución urgente”. “Exigimos que nos echen cuenta porque aquí hay familias que están pasando hambre y con la casa embargada. No hay derecho que a ciertas personas se les permita ganar 6.000 euros todos los meses y otros estemos pasando necesidades”, ha señalado Márquez.

El presidente de la Asociación de Mariscadores Nueva Umbría considera «incomprensible» que “gente de Sevilla, Cádiz y pueblos del entorno de Doñana pueden faenar en el coto, pero los de Huelva no”, al igual que no entiende que si hay 52 licencias sin utilizar para mariscar en Doñana «no se les dé al sector para poder trabajar».

Por último, Márquez ha reclamado a la Junta que esté «más vigilante» para impedir y sancionar a los cientos de veraneantes que todos los días cogen coquinas cuando la bajamar.