(Texto: C.B.V.) Del 3 al 7 de agosto, la Huelva taurina vivirá muy pendiente de sus decisiones. Juan León Lozano (Córdoba, 1960), jefe de la Unidad de Policía Adscrita a la Junta de Andalucía en Huelva, y presidente de la plaza de toros de La Merced tiene en su mano la responsabilidad de poner nota a los toreros que pisen el ruedo onubense en esta feria Colombina. Durante las últimas semanas ha estado trabajando a fondo en la selección de los toros y ahora le queda la tarea más comprometida, la de ser juez sobre el albero. Reconoce que esta es una tarea difícil pero asegura que pondrá todo de su parte para que todos disfruten porque esa, asegura es la última finalidad de las corridas.
¿Qué siente a tan sólo días para que comiencen las corridas de las Colombinas? ¿Nervios?
Por un lado quiero que llegue pronto y por otro lado que no llegue. Esta es una época previa, que tiene lo bonito de la expectación, hay que realizar muchas labores previas antes de que el primer toro esté en la plaza. Ahora estamos en el señalamiento, cuando los equipos gubernativos vamos al campo, vemos las corridas que se van a lidiar y señalamos aquellos toros que pueden ser útiles para que vengan después aquí, se produzca el desembarco en los camiones y se produzca el reconocimiento. Es una labor previa, ya se ven un poco las condiciones de la corrida, se ve cómo viene esa corrida y si hay algún ejemplar que al equipo gubernativo, tanto al presidente como a los veterinarios, le parece que no está adecuado en el conjunto de la corrida en Huelva se dice que ese toro no venga. Principalmente se busca que sea una corrida igualada, que sea lo más pareja posible y que sea acorde con la categoría de la plaza de Huelva, que como todo el mundo sabe es una plaza de segunda categoría, y buscamos un toro que sea lo más útil posible, para que con él se puedan dar las mejores faenas, para que triunfen los toreros, el público se divierta y para que la empresa gane mucho dinero y todo el mundo se lo pase bien.
Parece que el objetivo económico este año está cumplido…
Parece que sí, sé que hay mucha expectación. Hoy en día José Tomás ha roto la inercia que había en el mundo de los toros en las últimas temporadas y estamos ante un fenómeno taurino de primera magnitud. Creo que esto es comparable a cuando irrumpió el Cordobés en los años 60, o como en la época de Manolete y aquellos duelos entre Joselito y Belmonte. En el mundo de los toros en las últimas décadas, por lo menos que yo haya conocido, no ha habido nada igual. ¿Y qué ha influido? Ha influido tanto la personalidad de José Tomás como la forma en que sus mentores, sus apoderados, lo están llevando, se deja ver poco y siempre hay mucha expectación por verlo y sobre todo por su forma de torear, es un torero que se arrima todos los días, que tuvo una gravísima cogida en México y que después de año y medio sin torear reaparece y en Huelva vamos a tener la suerte que sea la segunda corrida después de su reaparición y eso ha generado mucha expectación y ya veremos cómo se da todo.
¿Qué siente al ver el cartel que se ha elaborado para estas Colombinas?
La verdad es que los carteles están bien, dentro de las posibilidades que hay del número de festejos que se celebran en Huelva intentar introducir muchas figuras del toreo en pocos carteles, que es muy complicado. No todos los toreros valen para torear los mismos festejos. Es evidente que un cartel con José Tomás ya con su sola presencia está rematado y además aquí le pones en Huelva la presencia de un torero local, que lleva ya 25 años de alternativa y que tiene muchos seguidores en Huelva, y eso refuerza la presencia de José Tomás. Es evidente que en otras plazas Silvera no sería el adecuado pero aquí en Huelva sí. También puede venir bien Luque, que es una figura de primer nivel que está irrumpiendo con fuerza en todas las grandes ferias, lleva ya unos años de matador de alternativa y creo que puede ser una terna en principio atractiva. Eso habrá que conjugarlo después con el ganado, de El Pilar. Yo estoy seguro que la corrida va a venir perfecta porque todo el mundo quiere que sea un éxito total. Todo eso se va a meter en una coctelera como es la plaza de La Merced, en un día de fiesta importantísimo para Huelva como es el 3 de agosto, con una expectación a tope y esperemos que sea una gran tarde. De todas maneras hay un dicho en el mundo del toro que es tarde de expectación, tarde de decepción, esperemos que no sea el caso porque la expectación desde luego es máxima.
Esta es su segunda temporada como presidente de La Merced. ¿Cómo fue la primera experiencia?
La experiencia fue muy positiva, fue muy bonita. Yo ya había estado de presidente de algunos festejos en plazas de tercera categoría, también había estado de delegado gubernativo, tanto en esta plaza como en otras de primera, segunda y tercera. Llevaba un bagaje en el mundo de los toros pero ser presidente en la plaza de toros de La Merced y ante la afición de Huelva y en una ciudad como Huelva es una grandísima responsabilidad por un lado pero por otro lado es un orgullo muy grande, el poder decir que uno aporta su granito de arena para conseguir que los festejos se desarrollen lo mejor posible y para que la gente se lo pase lo mejor posible, que es de lo que se trata.
¿Es muy complicado conseguir eso?
Es complicado porque juegan siempre dos factores, por un lado hay que conseguir que el toro que venga a estas corridas sea un toro apto para Huelva, que tenga unos kilos suficientes para una plaza de segunda, que su presencia esté bien, que esté bien rematada la corrida, que esté igual, astifina de pitones, que tenga buen trapío y, por otro lado, hay que congeniar un poco las grandes dosis de euforia que tiene muchas veces el público y quiere pedir muchas orejas para que todo el mundo triunfe y salga por la puerta grande de La Merced con lo que demanda la afición, que es que Huelva sea una plaza donde cueste trabajo cortar una oreja porque eso le va a dar importancia a la plaza y que el torero que venga aquí tendrá que venir a revientacalderas, a jugarse el todo por el todo, a arrimarse porque tiene que saber que la afición de Huelva le va a pedir la oreja cuando consiga un triunfo grande. Ahí está la labor del presidente para contabilizar un poco si hay mayoría o no en la petición y para ser lo más justo posible en la concesión de trofeos.
Por lo general la afición de Huelva es agradecida…
El público de Huelva es agradecido, a la afición de Huelva, que es un tanto por ciento pequeño con respecto al cien por cien que llena la plaza, sí le gusta y valora que se den las orejas que se tienen que dar, no más. De hecho, yo estoy muy agradecido a la peña taurina Tendido 12, que me distinguió el año pasado por el criterio que había mostrado el palco en la concesión de los trofeos. Creo que muchas veces es difícil y algunas veces que otras te llevas una bronca, yo intento siempre no equivocarme, lo más normal es que como humanos nos equivoquemos pero bueno vamos a intentar que sea el menor número de errores posible, que seguramente los habrá.
Esperemos que se lo pongan fácil…
Esperemos que lo pongan fácil los toreros, que lo pongan fácil los toros, que lo ponga fácil el público y todo eso se va a meter en esa coctelera que digo que es la plaza de toros de La Merced y esperemos que salgan grandes tardes de toros.
¿En qué lugar coloca a Huelva en el mundo del toro?
Huelva tiene una feria importante en Colombinas, que tiene que competir aquí en Andalucía con otra feria importante que suele coincidir siempre en los carteles que es El Puerto de Santa María. De hecho este año tenemos dos grandes carteles que coinciden el sábado día 6, por un lado Huelva con la presencia de ‘El Juli’, Perera y Talavante y El Puerto con un mano a mano entre Morante de La Puebla y Manzanares. Huelva, ya digo, tiene una feria importante, pero tiene un problema desde mi punto de vista y la verdad es que los tiempos son como son y es que Huelva ya no es una plaza de temporada, ya es una plaza solamente de la feria de Colombinas y prácticamente ya hace unos años que no hay ningún festejo el resto del año. Ahí influyen muchas cosas, influyen los tiempos actuales, influye la crisis porque que es difícil, cuesta dinero muchas veces montar corridas de toros, es difícil arriesgar porque te puede salir bien o te puede salir mal y en definitiva esa es quizá la pega que tiene hoy en día la plaza de Huelva. De todas maneras Huelva es las Colombinas, el verano, las playas, la gastronomía y la verdad es que muchísima gente vienen de Sevilla, aficionados taurinos que vienen a echar el día de playa, a comer los manjares de la tierra onubense y después a pasar una tarde magnífica en los toros y despedirse con una copita en los bares de alrededor de la plaza y comentar las incidencias del festejo, que es lo que hacemos todos normalmente en esta época.
Hace unas semanas el presidente de la Tertulia Litri aseguraba en estas páginas que es necesario que salga un torero de la tierra para que resurja la afición al toreo en Huelva. ¿Qué opina?
Eso es real. La expectación la van creando determinados toreros. Hay toreros que en unas plazas crean muchísima expectación y en otras no, son toreros de la tierra. En Huelva la verdad últimamente desde que la saga de los Litri parece que de momento está parada, desde que Miky se retiró hace unos años no ha habido otro Litri, que parecía que era la saga que ha arrastrado siempre la tauromaquia en Huelva. Los toreros quizás no están ahora mismo en primera línea de las figuras pero bueno la empresa de Huelva ha tenido la vista de hacer una novillada dentro de los carteles de las Colombinas, donde van a torear tres toreros de la provincia de Huelva, chavales que están empezando y que van a tener una oportunidad en la feria de su tierra y esperemos que eso vaya poquito a poco arrancando. La verdad es que es difícil hoy en día el mundo de los toros, los toros son un espectáculo que muchas veces se piensa que es caro pero hay veces que partidos de fútbol son más caros que corridas de toros. Quizás tenemos que ir atrayendo a la gente joven a los toros. Yo siempre digo que hay una experiencia magnífica que tiene la plaza de toros de La Maestranza de Sevilla, donde se celebra las noches de los jueves un festejo de promoción, de novillada sin caballos, la noche que hoy en día suele salir la juventud en Sevilla en verano porque los fines de semana se suele ir a las playas. Esa juventud está viniendo masivamente y se llena la mitad o las tres cuartas partes de la plaza y muchísima gente es gente joven, los grandes aficionados, y gracias a eso la juventud está empezando a venir a los toros. ¿Eso habría que hacerlo en otras plazas? Pues probablemente sí. Si no hay corridas, novilladas, con caballo y sin caballo es difícil que vayan saliendo figuras y si no hay corridas en Huelva va a ser difícil que haya toreros de Huelva, eso suele ser la pescadilla que se muerde la cola. Había una frase que me da mucha pena pero quizás sea verdad. Dicen que en Cataluña los toros si no los hubiera prohibido la Generalitat hubieran muerto por inanición porque prácticamente no quedaban plazas, había poquísimos festejos en la Comunidad. Dando festejos será más difícil que eso pase en el resto de España y la afición hay que ir creándola, hacer medidas de apoyo, el fomento taurino tiene que empezar por las figuras que tienen que colaborar en eso porque si todo el pastel se reparte solamente entre las figuras y las grandes ganaderías queda muy poco trozo para los demás, por lo tanto va a ser difícil que vaya habiendo ese relevo generacional que demanda el futuro de la fiesta.
¿Qué les diría a los jóvenes para que se aficionen a los toros?
Yo diría que es un espectáculo de primer orden, la tauromaquia es un arte que tiene siglos porque aparte de espectáculo es arte, y que es un espectáculo que encierra mucha verdad. No hay un ningún espectáculo como este donde una persona se enfrenta directamente con un animal que es salvaje, que gracias a los toros ese animal existe porque si no estaría reducido a una presencia en un zoológico. Vamos por ahí por esas dehesas de Andalucía, de Extremadura o de Salamanca, y la verdad es que vamos viendo que es una especie que está ahí gracias a que hay corridas de toros. Cuando uno se mete en una plaza de toros la entrada que ha sacado le da derecho a ver ese espectáculo y a saber que es parte de una cadena histórica que empezó hace varios siglos y que ha llegado hasta el día de hoy y por supuesto que es arte y que si uno consigue meterse en él es un sentimiento. ¿Qué él toro sufre? Pues no lo sé. Yo creo que el sufrimiento es una cualidad desde el punto de vista humana y seguramente sufrirá más ese toro que no es bravo, que es de carne y que lo van a matar dándole un shock eléctrico y electrocutándolo para que después podamos comernos la carne. Vamos a ver una situación artística donde se enfrentan por un lado una fiera y por otro lado un hombre, que pone en juego su integridad física, incluso su vida para conseguir una situación plástica, artística. Muchas veces hablamos de los toros sin haber ido nunca a una corrida de toros, simplemente por la foto que pueda haber en un periódico o por ver una corrida en la televisión, que no tiene nada que ver, el ambiente, el colorido, la música, la sensación, la afición que transmite el aficionado que tiene uno al lado, esos comentarios que te hace el compañero de tendido, no lo puede hacer nunca uno en esas corridas de toros que sólo las vemos por el ojo de la cámara y por el comentario de un locutor, ahí se pierde gran parte de la verdad que tienen los toros cuando uno los ve en directo.
¿Cómo está afectando la crisis al mundo del toro? ¿Igual que a otros sectores?
Me imagino que estará afectando igual que a todos. Es evidente que antes había muchos festejos que se celebraban porque los ayuntamientos colaboraban, porque subvencionaban las fiestas pero hoy en día esa subvención es imposible porque algunos pueblos no es que no tengan toros en la feria es que incluso están suspendiendo las ferias, a lo mejor se han hecho mal algunas situaciones anteriores y hoy en día estamos donde estamos. La verdad es que se están celebrando muchísimos menos festejos y eso repercute que en esos pocos festejos que se están celebrando, va a ser más difícil que aquellos toreros que están empezando encuentren un hueco. Eso va a ser un tapón para las fiestas. Va a haber ganaderías que al no tener salida los toros van a ser muy difícilmente viables económicamente. Ya veremos dentro de unos años cuando analicemos la situación actual cómo va a quedar el mundo de los toros, la verdad es que es un problema para el mundo de los toros.
¿Cree que la prohibición de Cataluña puede tener una repercusión en comunidades como Andalucía?
Allí se ha cogido la suspensión de las corridas como algo identitario. Parecía que si rompían con los toros, que parece que es algo español, son menos españoles. Eso también se une a determinadas ideas políticas, próximas a situaciones de marginalidad, de ecologismos mal entendidos, porque yo he visto personas que estaban protestando contra la ley de toros y después iban con abrigos de pieles, lo que pasa es que ahí hay mucha incultura y son personas que son fácilmente manejables. Ahí se esconden, más que en contra de las fiestas directamente, motivos de índole social, política y de identidad nacional o de intentar conseguir que Cataluña sea cada vez menos España. Se esconden esos motivos más que realmente un choque frontal de los catalanes contra los toros. De hecho el toro no sólo es la corrida de toros que pueda torear José Tomas, son las corridas de novillos con caballos, sin caballos, es el rejoneo, son las escuelas taurinas donde hay muchísimos chavales que quieren ser toreros, donde hay una formación no sólo como toreros sino también como personas. Las corridas de toros también son los encierros populares, aquí en Huelva tenemos San Juan, tenemos Trigueros, tenemos Beas. Eso que en Cataluña se llama correbous son festejos taurinos y en los correbous se corren los toros pero también se torean en las plazas de los pueblos en Cataluña, sin embargo como eso tiene un nombre catalán parece que no hay que suspenderlos y eso, de hecho, no se ha suspendido y eso demuestra que no hay una claridad en qué hacemos, por qué suspendemos, por qué queremos que no haya corridas de toros. Falta profundidad en lo que se ha decidido.
¿Qué supone para el mundo del toro perder las plazas de Cataluña?
Pues no lo sé, la verdad no creo que suponga mucho porque Cataluña ya tenía muy poquitas plazas donde se daban corridas. Cataluña en los años 60 era un sitio importantísimo dentro del calendario festivo anual pero hoy en día Cataluña tenía pocos. Lo que van a conseguir es que los aficionados de Cataluña, que son muchísimos, pues se dirijan a Aragón, se vayan a Castellón a la feria de la Magdalena o crucen la frontera y se vayan a Francia donde muy cerquita de las localidades catalanas hay localidades francesas que tienen unos magníficos carteles de toros, no tiene mucho sentido, pero bueno.
¿Qué desea para las Colombinas?
El primer deseo es que todo salga de acuerdo al guión que previamente nos marcamos. Podemos buscar un toro que tenga una lámina perfecta, que tenga unos pitones astifinos y que sea precioso y que después el toro salga manso o que no sea útil para la lidia o que ese toro tan bonito pise mal y se estropee una mano y tengamos que devolverlo. Me asusta ese dicho taurino que dije antes de corrida de expectación corrida de decepción cuando ves que hay una feria este año en Colombinas que hay muchísima expectación. Ojalá se den todas las corridas con todo el ganado que está previsto, que los matadores triunfen y que el público se lo pase bien y disfrute porque de eso se trata, de que la gente venga a los toros a disfrutar. Afortunadamente en esta plaza, en general en Andalucía, por nuestro carácter y por nuestra forma de entender los toros, porque hemos tenido aquí los grandes maestros y porque Andalucía es una parte importantísima en el mundo de los toros, en general el público viene a disfrutar de una corrida de toros no como en otras plazas que la gente va un poco a protestar y a reñir y a que no se triunfe. Aquí venimos positivos e intentaremos que esa positividad de la afición vaya a todos los rincones de la fiesta.