(Texto: ALBERTO V.) Rafael Vázquez, hombre de 34 años, vecino de El Rompido y conocido en Cartaya y El Rompido por su labor altruista en Protección Civil, entre otras de sus facetas de voluntario, ha denunciado ante el Defensor del Pueblo Andaluz la injusticia que considera se ha cometido con él al denegarle el permiso para trabajar como marinero debido a su tartamudez.
Rafael, que padece una disfemia de nacimiento, asegura que superó todas las pruebas pertinentes para obtener el correspondiente carné de pescador, aunque no pudo pasar el reconocimiento médico en el Instituto Social de la Marina, algo que considera «una total discriminación».
En el reconocimiento médico, expedido el 12 de abril, pasó todas las pruebas, aunque fue declarado no apto porque, según el facultativo, tiene «tartamudez intensa y comunicación verbal difícil».
Vázquez nunca ha tenido problemas para trabajar en otras ocupaciones y recuerda que durante doce años ha sido albañil, forjador y empleado de gasolinera, además de voluntario de Protección Civil.
A pesar de que tiene diagnosticada también una leve minusvalía psíquica, cuenta con informes de psicólogos que acreditan que está capacitado para desarrollar cualquier labor profesional.
Cuando realizó los exámenes, aportó distintos informes positivos de centros de terapia y rehabilitación, e incluso copias de las gestiones que se han realizado desde el Ayuntamiento de Cartaya para ayudarle.
Rafael Vázquez ha dicho que «nada más entrar en la consulta del médico, ya me recordó que era tartamudo, y en el informe se refleja claramente», de forma que lo ha recurrido con la esperanza de que le sea concedido el carné, que le permitirá practicar de forma legal la pesca de bajura.
No obstante, se lo toma con humor: «Me senté en la consulta y el médico me dijo que si era tartamudo, y yo le dije ‘Qué pasa, ¿que no se me nota’?».
La madre de Rafael Vázquez, Carmen Ross, ha lamentado que no han tenido en cuenta que es una persona que quiere trabajar, y están perjudicando a toda una familia, porque su padre tiene ya ochenta años, y dependemos en casa también de su sueldo».
1 comentario en «Un médico impide trabajar como marinero a un vecino de El Rompido por ser tartamudo»
Me parece increible que pase esto en la época en la que estamos.
Soy amigo de Rafael y nunca le he visto rendirse.
Ha superado todo tipo de obstaculos y este no va a ser menos.
Animo rafael que tus amigos estan contigo.
Antonio expósito