La Interprofesional de la Fresa Andaluza manifiesta su preocupación ante el anuncio lanzado desde Marruecos en el que se da prioridad la firma del acuerdo agrícola con la UE para poder seguir avanzando en los tratados de buena vecindad. El hecho de que el nuevo acuerdo pueda llegar a ser aún más permisivo con los cupos de frutas y hortalizas del país alauí perjudicaría considerablemente los intereses de los agricultores españoles y en especial, de la fresa onubense.
Este miércoles tendrá lugar en la Comisión de Comercio Internacional (INTA) del Parlamento Europeo la votación del pacto comercial entre la Unión Europea y Marruecos, un acuerdo que podría suponer la liberalización agrícola con el país vecino y la mejora de las condiciones de entrada de una serie de productos que se consideran “sensibles”, entre los que se encuentra la fresa. Esto supone, a juicio de la Interprofesional de la Fresa Andaluza, Interfresa, -que representa al 100% del sector, en el que a su vez Huelva supone cerca del 95% de la producción española-, un perjuicio directo e injustificado a los intereses nacionales y provinciales.
Para el presidente de Interfresa, Cristóbal Picón, lo justo sería que se proceda con el acuerdo agrícola y comercial del mismo modo que se hizo con el pesquero, suspendiéndolo, ya que se ha demostrado que la introducción masiva de productos procedentes de Marruecos, sin que se garantice que las condiciones medioambientales, sociales y fitosanitarias sean las mismas que las de cualquier productor europeo, supone un flagrante acto de competencia desleal. Pero además, es notorio que los actuales sistemas de control aduanero no funcionan, con lo cual las fronteras se convierten en un coladero que dan lugar a que incluso entre producto por debajo del precio fijado en el actual acuerdo con total impunidad, y con el consiguiente perjuicio a la Hacienda comunitaria.
La consecuencia de esta situación de descontrol, tal y como se plantean las condiciones que están en este momento sobre la mesa de negociaciones y que serán aún más permisivas para Marruecos, es el hundimiento de los precios de los productos hortícolas españoles, y por consiguiente, el cierre de explotaciones, con la consiguiente repercusión sobre la ya maltrecha economía de nuestra provincia y la destrucción de cientos de puestos de trabajo en un sector que, por el momento, y atendiendo a la situación de desempleo que padecemos, es el único que es capaz de dar un respiro a las estadísticas del INEM.
Por tanto, desde la Interprofesional se insta y anima al ministro Arias Cañete, que ya ha manifestado su desacuerdo con las condiciones del pacto, y a la Comisión de Comercio Internacional, que no se dejen chantajear por el anuncio de Marruecos, que supedita los tratados de buena vecindad al resultado del acuerdo agrícola, y que no dejen de proteger a los productores y consumidores europeos, españoles y muy especialmente a los onubenses, atendiendo a otro tipo de intereses que nada tienen que ver con la agricultura.
