El portavoz de Izquierda Unida en el Ayuntamiento de Cartaya, Miguel Ángel Gea, ha abandonado el pleno que se celebraba esta tarde del viernes en el Ayuntamiento para que el equipo de gobierno municipal explicase el plan de ajuste que aprobaron hace un mes ICAR, PP, PA y UPyD. El abandono se ha producido ante la negativa del alcalde, Juan Polo (ICAR), a ofrecer la información sobre qué criterios tiene el gobierno municipal para aplicar el plan y luego poder debatir todos los grupos sobre dicha información.
Según la nota hecha pública desde IU, «Polo ha obligado a los grupos municipales a agotar los dos turnos de palabra que les corresponden sin ofrecer ni un solo dato y negándose a informar previamente sobre el plan, motivo por el que IU y PSOE habían solicitado la celebración del pleno. La petición de IU de que el alcalde informase para poder luego debatir con normalidad ha sido respondida por el portavoz del PP y del equipo de gobierno, Gabriel Maestre, con insultos y amenazas de desalojo».
El portavoz de IU ha explicado que el equipo de gobierno quiere reducir en un 10% la masa salarial en 2012 y en un 12% en 2013 mediante el despido de trabajadores municipales. Para Gea, «el único criterio para prescindir de trabajadores serán las ideas políticas que éstos puedan tener, como ha ocurrido recientemente con el despido de cinco trabajadores y el desmantelamiento del servicio de orientación laboral».
IU denuncia que «el plan de ajuste no ha sido dialogado ni con los representantes de los trabajadores municipales ni con la oposición de izquierdas. Ese plan eliminará casi dos millones de euros en dos años del dinero destinado al pago de salarios. El equipo de gobierno ya ha anunciado que los recortes salariales no afectarán ni a lo que cobran los concejales de ICAR, PP y PA, ni a los salarios de sus asesores y personal de confianza».
Por último, desde la coalición se indica que «es vergonzoso que el actual alcalde utilice para evitar el debate los mismos métodos que criticaba cuando estaba en la oposición y abuse de su condición de presidente del pleno para no someterse a las preguntas de la oposición. Es una cobardía que hoy Polo haya convertido el pleno en una farsa y haya rehuido el debate mediante el uso de triquiñuelas, no queriendo ofrecer al principio del pleno la información que se le pedía y reservándola para el final, cuando nadie le puede interpelar».