La Asamblea Ciudadana ha decidido volver a convocar a los vecinos de Valverde del Camino para protestar este viernes contra la “abusiva subida del Impuesto Sobre Bienes Inmuebles” aprobado por el equipo de Gobierno municipal, que llega a alcanzar en muchos caso el 40 por ciento de incremento. La concentración tendrá lugar como cada viernes laborable desde hace un mes en la plaza de Ramón y Cajal a las ocho de la tarde.

En un comunicado que circula por la localidad, la Asamblea Ciudadana señala que “sólo quiere apuntar un conjunto de sugerencias y observaciones, con el ánimo de no dejar sin respuesta una cordial recepción del Ayuntamiento a su petición de diálogo, y de ayudar en lo posible en la búsqueda de una solución al problema planteado, afirmando de paso algunas premisas esenciales para el mantenimiento de una sociedad democrática que no olvide la justicia social. Pero también ha querido dejar claro que en su criterio último prevalece lo más obvio: Es a la Alcaldía y a su Corporación Municipal a quien corresponde plenamente el deber de encontrar las soluciones y los medios necesarios para resolver de la mejor manera posible los problemas planteados en el Municipio”. Para eso se presentan las candidaturas electorales. Y para eso son elegidos por el pueblo los representantes. Y por hacerlo se les reconoce y se les paga.

La asamblea considera “totalmente desmesurada, abusiva e injusta la subida del IBI y exige que se suba como máximo lo mismo que ha subido el IPC”. Entre las sugerencias que aportará a la próxima reunión con el equipo de Gobierno destaca “utilizar parte del superávit del presupuesto para cubrir la diferencia entre las cifras de la decisión del Ayuntamiento y las de la reivindicación ciudadana”. También, “usar parte del dinero que el ayuntamiento va a recibir de Aqualia para el mismo fin, siempre que esta partida no esté ya totalmente comprometida para el pago de nóminas atrasadas a los trabajadores municipales. Realizar una estimación de lo que va a suponer el aumento de los ingresos por afloramiento del IBI sumergido y contabilizarlo también para cubrir la exigencia ciudadana de bajada del impuesto.

Realizar nuevos ajustes en los gastos de festejos de todo el año. Reducir gastos de cargos políticos y adjuntos:Reducir al mínimo imprescindible el número de liberados.

Eliminar los asesores y personal de confianza que cobren del presupuesto.

Ajustar las remuneraciones de todos los cargos políticos (alcaldía, concejales y liberados realmente imprescindibles) hasta que se sitúen en unos niveles realmente dignos pero indudablemente sobrios, en concordancia con la precaria situación económica que padecemos, entre otras medidas.

Para plantear con fuerza esta demanda ante las Administraciones, la Asamblea Ciudadana exige “la unión y lealtad mutua de todos los grupos políticos presentes en la Corporación Municipal, y por supuesto ofrece su participación y las medidas de presión que estén a su alcance hasta conseguir los objetivos planteados para la buena marcha de nuestro Ayuntamiento”.

Asimismo, la Asamblea Ciudadana no aceptará, de ninguna de las maneras “ningún recorte de servicios, ni cierre de los mismos, ni despidos de trabajadores, ni disminución de salarios o retrasos en el pago de nóminas, que se pudieran pretextar maliciosamente como consecuencia necesaria de la justa reivindicación de rebajar la subida desproporcionada del IBI”.