La juez de guardia, la titular del número 3 de Instrucción de la capital, Ana Belén Vico, ha dictado auto de prisión sin fianza y comunicada -sin obligación de mantenerlos separados en la cárcel- para los dos detenidos por el secuestro y muerte de la pequeña Miriam. Jonathan Moya, de 25 años y autor confeso del crimen, y su amigo Raúl Ríos, de 25 años y a quien se le imputa encubrimiento, según informa el diario La Voz de Almería en una información firmada por la periodista Carmen López. En concreto, a los dos se les acusa de un delito de asesinato y, en el caso de Jonathan Moya, otro de detención ilegal.
Los dos detenidos salían de las dependencias de la Ciudad de la Justicia con destino a la prisión de El Acebuche a las 15.40 horas de ayer, después de prestar declaración ante la magistrada. Sí ha trascendido que ambos detenidos se han acogido a su derecho a no declarar.
Sobre la misma hora salían del Juzgado de Guardia las abogadas de la defensa, que confirmaban que la juez había dictado auto de prisión para los dos detenidos y que aseguraban que no podían facilitar más información sobre el contenido del mismo, porque “también está sometido al secreto de sumario”.
La última en abandonar la sede de la Ciudad de la Justicia fue la juez, Ana Belén Vico, que una vez que ha tomado declaración a los detenidos y dictado el auto, devuelve las diligencias al Juzgado de Instrucción número dos, que es el que lleva el caso.
Ambos detenidos ingresaron en la cárcel almeriense de El Acebuche a las 15.40 horas del sábado tras prestar declaración ante la jueza en la Ciudad de la Justicia de Almería.
Los detenidos han declarado ante la juez de guardia por ser fin de semana ya que el juzgado encargado del caso es el de Instrucción número 2 de Almería, que en su día ordenó el secreto de las actuaciones.
Según diferentes medios, Jonathan Moya habría ofrecido a Raúl Ríos 50.000 euros por participar en un secuestro de la niña, si bien aseguran que no se lo tomó en serio.
Su localización y detención se produjeron la tarde de este jueves y fue esa misma noche cuando la Guardia Civil localizaba el cuerpo del bebé en una balsa del término municipal de Abrucena, en el Paraje del Campillo, dentro de una bolsa en la que también había piedras.
La autopsia se realizó durante la mañana del viernes en el Instituto de Medicina Legal de Almería y determinó que Miriam no falleció ahogada en la balsa, apuntando a un traumatismo cráneo encefálico como causa de la muerte. No obstante, se han remitido muestras del cuerpo del bebé, que fue enterrado ayer en Huelva, al Instituto de Toxicología de Sevilla, para determinar el momento exacto de la muerte de la pequeña, pues los resultados de la autopsia no son concluyentes en cuanto a la fecha y los forenses estiman -según fuentes de la investigación- que podría haber fallecido entre dos y cinco días antes del momento en que la hallaron en la balsa. El segundo de los detenidos, Raúl Ríos, ha ingresado en prisión tras prestar declaración por haber encubierto, presuntamente, a Jonathan Moya.