Izquierda Unida de Gibraleón ha informado a través de una nota que ha logrado introducir un programa de Renta Social Básica Familiar en el Presupuesto Municipal de 2013, aprobado en el último Pleno celebrado el pasado jueves 25 de abril.

La propuesta de la coalición de izquierda sobre el salario social va a ser dotada con 110.000 € de los recursos propios del ayuntamiento olontense para desarrollar el programa de Renta Social Básica, dirigido a aquellas unidades familiares que no cuentan con ningún tipo de ingreso ni cobertura o un ingreso mensual inferior a 426 €, con el fin de prevenir o atajar casos de grave exclusión social.

La unidad familiar debe estar constituida de forma estable, con un año de antelación, como mínimo, a la fecha de la presentación de la solicitud, salvo en los casos de matrimonio o pareja de hecho, nacimiento, adopción o acogimiento de hijo o hija y ruptura familiar suficientemente acreditada. Asimismo debe estar todos sus miembros empadronados como residentes en el municipio de Gibraleón, al menos con 12 meses de antelación a la fecha de presentación de la solicitud.

El programa se materializará mediante contratos de trabajo temporales de inserción laboral. Serán 15 familias, uno por cada unidad familiar, con un contrato por un período rotativo de 3 meses, a tiempo parcial, con horario y jornada flexible, según las necesidades del servicio y con una percepción líquida de 426 €. En ningún caso los beneficiarios/as de este programa desarrollarán trabajos estructurales que vienen realizando la plantilla del ayuntamiento.

El control de este programa lo llevará a cabo la Comisión de Seguimiento de la Bolsa de Empleo constituido en esta legislatura y compuesta por un representante de cada formación política presente en la Corporación Municipal.

Izquierda Unida de Gibraleón se siente muy satisfecha por la buena acogida que ha tenido esta iniciativa y agradece el apoyo conseguido de las demás fuerzas políticas, que acordaron por unanimidad la puesta en práctica de este programa, en aras de paliar la grave situación socio-económica de algunas familias de nuestro pueblo.

Consideramos que es de justicia y de solidaridad no permitir que ninguno de los hogares olontenses caiga en la indigencia y la exclusión social, sobrevenida por la situación tan dramática a la que se ven abocadas muchas familias cuyos miembros han caído en el trágico pozo del paro.