He tenido la ocasión de presenciar muy airados a ciudadanos onubenses o forasteros ante esas máquinas expendedoras del ticket de la ORA, ya sea en Zona Azul o Zona Naranja. EL MOTIVO: Una vez han introducido suficientes monedas para retirar el ticket que le expende la máquina, y poder dejar así aparcado su vehículo en cualquiera de estas Zonas, según los casos, para cumplir escrupulosamente con la Ordenanza Municipal, el ciudadano “pagano” puede esperar y esperar a su cambio hasta desesperar. Después de leer en letra muy pequeña, la PATENTE DE CORSO de la que hace gala la dichosa máquina, alcanza a descubrir que esta máquina NO PROPORCIONA EL CAMBIO, es decir, te lo sisa y queda para las arcas de la Empresa Concesionaria, que no para el Erario Municipal. En cualquier caso es un atropello al ciudadano.
Es claro suponer que estas máquinas expendedoras de tickets de aparcamiento no estarán homologadas por la Normativa de la Unión Europea. Y si no, hagan la siguiente consulta allá a donde se pueda encontrar cualquier otra máquina expendedora (de tabaco, de chocolatinas y chuches, de bollos y sandwichs, de bebidas frescas, de café e infusiones), verán que si las máquinas que prestan estos servicios no fueran capaces de realizar los respectivos cambios, con el agravante de retener para sí las devoluciones correspondientes, lo primero que hace la Autoridad Competente, es denunciar al propietario de la máquina “inteligente”, con sanción de una fuerte multa y el correspondiente precintado de la susodicha máquina. El propietario, sería sometido con todo el rigor de las Leyes y si es que pretende reinstalarla de nuevo, tendrá que presentar un Dictamen de un Facultativo del Sector (Ingeniero y nuevo Certificado del Fabricante), y la posterior autorización de la Inspección Municipal e incluso de la Consejería de Industria de la Junta de Andalucía, si viniera al caso de que los hechos se producen en esta Comunidad Autónoma. En lo referido a las máquinas de la ORA de Huelva, sería de su competencia inexcusablemente.
Vengo a exponer esta circunstancia, por dos razones que considero de INTERES GENERAL para los vecinos de Huelva. La primera, que es ésta una situación anómala que se ha de corregir inmediatamente, bien sea que la Empresa adjudicataria modifique el “monedero” de sus máquinas o las cambie por otras adaptadas a la Normativa de la UE. También podría valer que solo admita monedas hasta el tope “lícito”, es decir, que si un usuario de la Zona de la ORA, introduce una última moneda que excede del tiempo legal que le va a expedir la máquina, se la rechace y solo le facilite un ticket por el importe que si puede asumir la máquina. La última palabra en esta materia la tendrían los ingenieros que diseñaron este aparato. Yo solo pretendo comentar esta situación.
La otra razón, es que en breve el Ayuntamiento de Huelva va a Licitar la adjudicación de la Zona ORA, con su posible ampliación a más calles, y entre otras condiciones y considerandos, tendrían que exigir a la Empresa Adjudicataria resultante, o bien la correcta adaptación a la Normativa de España y de la UE respecto a Máquinas Expendedoras o ante la imposibilidad material de esta readaptación, el cambio inmediato de tales máquinas por otras que operen con toda LEGALIDAD y sean sustituidas en un plazo lógico de tiempo, bajo severa sanción económica y precintado de las máquinas. Por la cuenta que le tendría a la Empresa Adjudicataria, no tardaría ni seis meses en extirpar esta especie de “PATENTE DE CORSO”.
Con ello, el Ayuntamiento de Huelva reconduciría esta flagrante situación ilegal, no permitiendo que nadie, sea persona física o entidad fiscal, se “arrope” bajo su manto para saltarse impunemente la Ley que regula a todas las máquinas expendedoras, incluidas las de la ORA de Huelva.