(Texto: José Antonio Mayo Abargues) Una tortuga boba de grandes dimensiones ha aparecido muerta en la playa de Ciparsa en Mazagón. Hasta el momento se desconocen las causas que la han llevado a varar en esta playa. Con mucha frecuencia, este animal solitario y migratorio llega herido a morir a las costas onubense víctima de accidentes provocados casi siempre por el ser humano.
A pesar del esfuerzo de la comunidad científica y de las organizaciones que luchan por su conservación, la tortuga boba sufre una serie de peligros, como es la contaminación marina, la pérdida de los hábitats de puesta por la ocupación turística y la pesca del palangre y el arrastre, que la sitúan en la lista de especies en extinción.