(Texto:Javier Moya) La localidad serrana de Corteconcepción disfrutó el pasado domingo de su V Ruta BTT con casi 54 kilómetros de recorrido. Una prueba ya consolidada y que volvió a tener el éxito de años anteriores. Una jornada agradable en cuanto al tiempo, quizás exceso de calor al mediodía, y mucha participación, con casi 140 inscritos, y en los últimos 15 kilómetros de competición oficial con la valentía de 83 deportistas. La plaza de la Concepción fue el lugar de la meta, bonito entorno cercano a iglesia que se llenó de vecinos y curiosos más familiares y conocidos de los participantes. En el pueblo se notó el ambiente deportivo y de convivencia durante toda la jornada. Mucha presencia de coches, familias al completo, cada uno de un punto diferente; tantos pueblos de la Sierra como de la provincia de Huelva y Sevilla principalmente, y como colofón una gran y completa comida en la nave municipal (croquetas con jamón, gazpacho, cocido, tortillitas, ensalada de pasta y postre). Pocos se perdieron tan suculento manjar. Formaba parte del precio de la inscripción y los acompañantes se podían quedar igualmente a disfrutar de la comida bajo un módico precio. Y así lo hicieron muchos de ellos para llenar de buen ambiente la amplia nave municipal.
El mejor en los últimos 15 kilómetros de competición, según información oficial, fue Jaime Rodríguez con 46:09.00, seguido de Alberto Sánchez y Alejandro Sánchez. El primer local, vecino de Corteconcepción, fue Daniel Hacha que acabó undécimo con algo más de 53 minutos y en 13º lugar el primer junior local para Pedro Manzano que además fue el primer junior de la general.
En la categoría de M 30 el mejor fue Manuel Auque (4º) y M 40 Juan Manuel Sánchez (9º). En M 50 el mejor tiempo lo obtuvo Miguel Paul (30º). En cuanto a mujeres la participación no fue amplia y la competición oficial solo la realizaron dos valientes; tanto Cristina Sánchez (59º con casi una hora y veinte minutos) y Sofía Romero (71º).
La ruta comenzó pasadas ligeramente las nueve de la mañana desde la travesía (el camino), junto a la nave y polideportivo municipal. Una localidad pequeña (unos 600 vecinos) pero muy activa deportivamente y en cuya organización hubo unos cincuenta voluntarios.
Los participantes comentaban en la meta la dureza de la ruta, pero lo gratificante que es disfrutar en primera persona de numerosos caminos, senderos antiguos que unían pueblos serranos y parajes naturales únicos. Un duro esfuerzo que siempre merece la pena y que hace que muchos de ellos expresaran su deseo de repetir en próximas ediciones y se comprometieron en expandir el mensaje para animar a futuros participantes. Incluso la ruta sirve como ejemplo de reclamo turístico porque muchos de ellos confirmaron su presencia en familia durante los próximos meses.