Este viernes se reunió, en el Ayuntamiento de la Palma del Condado, una comisión del Colegio de Procuradores de Huelva con el Parlamentario popular Juan Carlos Lagares Flores, para advertirle de las graves consecuencias que la Ley de Servicios y Colegios Profesionales provocará en el correcto funcionamiento de la Justicia española, si se mantiene el actual texto del anteproyecto.
El Decano de los procuradores, Enrique Hinojosa de Guzmán Alonso, destacó el papel esencialmente acelerador de la Procura en los trámites procesales y el protagonismo que tienen estos profesionales en la modernización de la Justicia a través de la implantación de la plataforma Lexnet, que ha posibilitado la notificación telemática de millones de comunicaciones en los últimos años, con la consiguiente rapidez y ahorro de papel.
Alertaron al Parlamentario, apelando a su condición de abogado, del enorme daño y caos que el Ministro De Guindos causará a la Justicia por no valorar suficientemente la labor de los procuradores, destacando además que sin costar un euro a la Administración, la enriquecen constantemente aportando parte de sus recursos materiales y humanos.
Resaltaron que si el Gobierno sigue adelante con su proyecto de eliminar la tradicional incompatibilidad entre abogado y procurador y sus funciones de defensa y representación, que ni siquiera Europa ha pedido, acabarán, por la vía de hecho, con una profesión que tiene una función aceleradora fundamental y que hará a la Justicia española siete veces más lenta de lo que es actualmente, con el impacto negativo que ello tendrá en la economía.
Los procuradores dijeron creer más razonable seguir la estela de los países europeos que, ante la falta de medios que implica la crisis, apuestan por reforzar las competencias de las profesiones hermanas a la Procura, como la de los huissiers.
También se quejaron del ataque del Ejecutivo a su Arancel. Consideran que da transparencia a la ciudadanía del coste de los servicios, alegando que sería discriminatorio y sectario eliminar los de este colectivo y no los de otros profesionales del sector que también los tienen.
Por último recomendaron que el Gobierno debería centrarse en arreglar los muchos problemas que existen hoy en día, en vez de crear nuevos donde no los hay. Que mire a los procuradores como un colectivo que ayuda al buen funcionamiento de la Justicia y cambie su actitud hacia ellos reforzando sus funciones para hacerlos todavía más eficaces, ya que si el Ejecutivo sigue intentando enfrentar a unos profesionales contra otros, lo que puede conseguir es que todos se unan contra él.