Artur Mas ha echado un órdago a la “chica” y ya se sabe que “ganador de chica” perdedor de Mus. Artur Mas sabe perfectamente que no tiene buenas cartas y además es postre, o dicho de otra forma, no tiene en su mano ley bastante para ganar la baza que se está jugando y de farol sale cual jugador de Mus que no tiene nada, vociferando, y que además es postre y que por tanto, a cartas iguales, gana siempre la mano. Dicho esto para aquellas personas que no conozcan este juego de mesa, se trata de un juego en el que se combina tanto las buenas cartas como la intuición de quien las tiene en su mano para sacar el mejor provecho a la baza. Buenas cartas en manos de un mal jugador, gana, pero gana poco. Esas mismas cartas en manos de un jugador impasible e intuitivo, pueden determinar hasta la propia partida. Así son las cosas en el Mus.
Lo que ocurre que esta baza la está jugando Artur Mas con su pareja Oriol Junqueras, que por lo que se ve tampoco es muy fino en este tema, y tienen por contrincantes a la Constitución Española y al Tribunal Constitucional. De croupier estaría, sin ser necesario para ello, Mariano Rajoy. Ya sabemos quiénes van a pagar la merienda y los mirones dan tabaco.
De momento ha transcendido que el Gobierno Francés, antaño le llamábamos gabacho hasta en los Bruchs, y el Gobierno Teutón de Angela Merkel, no han aceptado el envite, y han dicho con voz alta y clara: ¡”Pasamos”!. No ha trascendido, en caso de haber tenido respuesta, que le han contestado otras autoridades de los demás Estados Soberanos de la UE. Como Artur Mas ni su pareja en esta aventura sin retorno no han abierto el pico, nos hace pensar de que igualmente “pasan” todos los demás Gobiernos al igual que el de Monsieur François Hollande y el de Frau Angela Merkel. Pero miren por dónde, si hemos tenido conocimiento de la respuesta dada por el Presidente de la Cámara en Bruselas, D. Antonio Durao Barroso, aquél que le dijera a ex ministro socialista Borrell, que por favor no utilizara el catalán porque no le entendía, cuando el empático Sr. Borrell pretendió balbucir algunas frases en portugués para granjearse las simpatías de Durao Barroso. Figúrense ustedes que mezcolanza no haría de catalán, castellano y portugués que le era casi imposible alcanzar entendimiento alguno, cuando Durao Barroso habla un correcto castellano, así como el inglés y el francés y por supuesto, el portugués. Pero el catalán no se le da ni mal ni bien, simplemente no lo conoce y es una pena. Pues si, es una pena, porque no estaría de más de que todos los habitantes de la península Ibérica conociéramos todos los idiomas vernáculos que en ella se hablan, pero la realidad se impone decantándose por los más extendidos, que son el portugués y el castellano. A lo que iba, la respuesta de Durao Barroso ha sido nítida y contundente directamente a Artur Mas: Es un tema de incumbencia del Estado Español, pero en el caso de que Cataluña se separara del resto del Estado Español, formado un nuevo Estado, automáticamente quedaría fuera de la UE, dejando de percibir a partir de ese momento todo tipo de ayuda para el desarrollo de Cataluña (Inversiones FEDER entre otras) y estableciéndose por consecuencia, aranceles como para cualquier otro Estado que no tuviera suscrito ningún convenio preferencial. Ello lógicamente repercutiría en la libre circulación de capitales y de personas y la exclusión de la Zona Schengen para los poseedores de la nacionalidad catalana.
Y ahora no se hagan algunos catalanes, las víctimas con el tema de la Guerra de Sucesión y la pérdida de su fueros a manos de Felipe V d’Anjou, el primer Borbón, porque este desaguisado ocurrió para todos los españolitos, con la introducción de las Leyes de Nueva Planta. Perdieron sus fueros los gallegos y asturianos, los castellanos, incluidos los extremeños y andaluces, los aragoneses, valencianos y los baleáricos, y como no el último reducto de los seguidores del Archiduque Carlos de Hagsburgo, Cataluña. Pero es bueno recordar que antes de este triste final, las tropas aliadas en favor de la sucesión del Archiduque Carlos a la Corona de España, se libraron batallas y tomas como las de Ciudad Rodrigo y Salamanca, dos entradas triunfales del Archiduque en Madrid y otras tantas de Felipe d’Anjou, la batalla de Brihuega y la de Villaviciosa, la batalla de Almansa, Alcoy, la toma e incendio de Játiva, Denia, Valencia, Zaragoza y por último, la de Barcelona en la Península, la posterior toma de Palma de Mallorca e Ibiza y por último la recuperación de Menorca pasados más de 50 años de dominio británico, como consecuencia de la Paz de Utrecht, y todavía estamos esperando que nos devuelvan el Peñón de Gibraltar. Como verán en esa guerra también perdimos todos.