La Audiencia Provincial de Huelva ha condenado a S.S.V., de 34 años de edad, a cinco años y nueve meses de cárcel por un delito continuado de abusos sexuales contra su sobrina política, menor de edad, en un periodo de seis años –desde 2006 a 2012– cuando éste convivía con ella en la casa de su suegro y abuelo de la niña.
Según reza en la sentencia, a la que ha tenido acceso Europa Press, el tribunal de la Sección Tercera lo condena por un delito continuado de abuso sexual, sin penetración y con prevalimiento de parentesco sobre una menor y por otro de abuso sexual a menor de edad, absolviéndolo de un delito continuado de agresión sexual.
Por estos hechos, le impone una indemnización de 20.000 euros, le prohíbe a este hombre acercarse a la víctima o comunicar con ella por cualquier medio o procedimiento en ocho años y libertad vigilada durante tres años posteriores al cumplimiento de la condena.
Según ha adelantado el diario ‘Huelva Información’, el tribunal considera probado que en cierta ocasión de la primavera de 2006, cuando la pequeña tenía sólo siete años y pernoctaba en casa de su abuelo, S.S.V. «aprovechó que se encontraba en la habitación sobre la cama para abordarla y, con ánimo libidinoso, exhibirle un vídeo pornográfico en su teléfono móvil que ella soportó sorprendida y avergonzada».
Fue el primer episodio de contenido sexual de y, a partir de entonces, obligaba a la niña «a masturbarle con la mano hasta eyacular en muchas de las ocasiones» y a veces «la cogía de la cabeza pidiéndole que lo hiciera con la boca, sin que lo lograse».
Tras varios episodios de este tipo, el último fue en agosto de 2012, momento en el que la joven, en esas fechas de 14 años, decidió contar lo sucedido a su madre, cuñada del agresor, que presentó una denuncia por los hechos.