La secretaria general de Cultura, María del Mar Alfaro, ha mantenido hoy una reunión con colectivos y representantes de entidades vinculados al mundo de la Cultura para informar y debatir en torno al Anteproyecto de Ley de Estímulo de la Actividad Cultural, alternativa de Andalucía al modelo estatal y respuesta del Gobierno andaluz a la difícil situación económica que atraviesa el sector de las industrias culturales, agravada por la subida del IVA.
Durante su intervención, Alfaro ha señalado “que esta ley surge ante la demanda social y la necesidad de liberar parcialmente de la tutela pública, el desarrollo de la cultura, sin que esto suponga privatización alguna y sí un paso adelante a la sociedad civil”.
La futura norma andaluza, que emerge ante la paralización del proyecto de ley estatal, tiene como objetivo principal superar el actual modelo que hace depender la financiación de la cultura de las ayudas públicas e instaurar un nuevo marco basado en la colaboración público-privada. Y es que, según Alfaro, “es necesario dar salida a un sector sometido a una fuerte presión fiscal que está provocando un difícil desarrollo de las industrias creativas que han reducido un 25% desde el inicio de la crisis su número de puestos de trabajo aunque aún supone el 2,6% del empleo nacional”.
Según recoge el informe del Observatorio de la Cultura correspondiente a 2013, el 60% de las empresas culturales se han visto afectadas muy negativamente por la crisis económica, acentuada esta situación con la reducción de los presupuestos destinados a Cultura por parte de las administraciones públicas, donde se ha registrado una reducción del 35% de los Presupuestos Generales del Estado, sin perder de vista el descenso de consumo cultural de la ciudadanía y la subida del IVA cultural al 21%.
En base a estos datos, la Junta de Andalucía propone un nuevo marco jurídico para impulsar el desarrollo del sector y el consumo cultural que mejore la actual Ley 49/2002 de Régimen Fiscal de las Entidades sin Fines Lucrativos y de Incentivos Fiscales al Mecenazgo a nivel de otras legislaciones europeas; un marco que favorezca sobre todo a pymes y micropymes para que tengan acceso al mecenazgo cultural y que incorpore nuevas fórmulas de incentivos, como el micromecenazgo, abiertas a toda la ciudadanía.
Entre las medidas destinadas a estimular el consumo y que compensan el efecto de la crisis en el ámbito de las industrias creativas, la norma incluirá una deducción a las personas físicas, en el tramo autonómico del IRPF, del 15% de las cantidades empleadas (hasta un límite de 240 euros) en la adquisición de bienes culturales (como libros y obras de arte) o en el disfrute de servicios (entradas de teatro, cine, conciertos, exposiciones, etcétera). La medida va a destinar a fomentar el consumo cultural de más del 80% de los contribuyentes andaluces, ya que el límite que se fija en el tramo de renta es de hasta 45.000 euros en las declaraciones individuales y de 55.000 en las conjuntas.
Asimismo, el contribuyente tendrá derecho por la realización de donaciones a fundaciones y consorcios con fines de interés cultural, que será del 15% con un límite de 240 euros. La misma desgravación se establece en relación con las entidades del sector con ánimo de lucro o empresas, lo que posibilitará el fenómeno de la financiación colectiva de la cultura o micromecenazgo. Además, el anteproyecto de ley establece modificaciones en el Impuesto de Sucesiones y Donaciones para reducir las cargas por la transmisión de empresas o negocios de carácter cultural, lo que contribuye al mantenimiento y creación de empleo en el sector.
En cuanto al Impuesto sobre Transmisiones Patrimoniales y Actos Jurídicos Documentados, se fijarán tipos de gravamen reducido para las transmisiones de bienes del Catálogo General del Patrimonio Histórico Andaluz que vayan a ser incorporados a empresas, actividades o proyectos de carácter cultural (hasta un 3,5%), así como para los actos jurídicos que las documenten (0,3%).
Otras disposiciones tributarias se encaminan a impulsar la adquisición, recuperación, conservación y difusión del patrimonio histórico y cultural de Andalucía. Entre ellas destaca la deducción del 15% para donaciones de terceros destinadas a bienes de interés cultural de titularidad autonómica y a las inversiones de los propios propietarios. También se recogen deducciones en el IRPF que incentivan a los autores a la donación o depósito de obras a favor de las instituciones culturales de la Junta.
Asimismo, y para optimizar los recursos propios de las instituciones culturales, se prevé la creación de una tasa para el uso especial de estos espacios de la Junta que permitirá ampliar las posibilidades de mantenimiento y financiación de las mismas. Se trata, en definitiva, según la secretaria general, de “promover la participación ciudadana, la transparencia y las iniciativas de colaboración pública-privada”.
El acto ha contado con una nutrida asistencia de representantes del mundo del flamenco, las letras, editores y críticos literarios, universidad y personalidades relevantes del mundo de la cultura onubense.