El alcalde de Huelva, Pedro Rodríguez, acompañado por la teniente alcalde de Servicios Sociales, Pilar Miranda, por el director de operaciones de Aguas de Huelva, Simón Pulido Leboeuf, y por representantes de la Cruz Roja, ha clausurado esta mañana el Campamento ‘Aguas de Huelva’ destinado a la protección de los menores más vulnerables durante todo el verano. El objetivo principal de este proyecto ha sido el de asegurar la ingesta de tres comidas al día a 57 menores onubenses, aprovechando para involucrar a las familias en pro de su integración social. Para ello, a través de una Escuela de Padres se ha trabajado para crear un grupo de auto-ayuda en el que han participado las familias, en torno a las actividades de refuerzo escolar, acompañamiento, trabajo del ocio y el tiempo libre de los menores.
En el campamento, enmarcado en un completo programa de actividades, los menores por la mañana han tomado el desayuno, antes de marcharse han almorzado y una vez finalizada la comida, reciben la merienda para que puedan consumirla en casa por la tarde.
Los beneficiados han sido 50 menores, niños y niñas de entre 6 y 12 años que, en algunos casos, presentaban dificultades en su proceso escolar y todos pertenecen a familias en situación de riesgo de pobreza y exclusión social, con ingresos por debajo del umbral de la pobreza.
Más de 40 voluntarios de Cruz Roja, entidad encargada de la gestión del campamento, han trabajado en un campamento que arrancó a principios de julio y se ha desarrollado hasta hoy, de lunes a viernes, de 10 a 14 horas. En total 40 días laborables, en las instalaciones municipales de Asociación de Vecinos El Ancla, en la barriada de El Carmen, aunque han participado menores de otras zonas de la ciudad, cuyas familias necesitan este apoyo.
Con el fin del periodo escolar, el principal objetivo de este campamento ha sido el aporte de alimentos y asegurar la cantidad de nutrientes adecuados para una alimentación saludable. Pero además, se ha pretendido dar a las familias una cobertura completa, tras finalizar el colegio, durante los meses de verano, garantizando además de la correcta alimentación de los menores, la mejora de la calidad de vida de unos niños que viven en situación de riesgo, intentando suplir las carencias que puedan estar soportando en sus hogares.
El proyecto financiado por Aguas de Huelva además de alimentación, ha ofrecido a los menores llenar su tiempo de ocio con actividades lúdicas, culturales, deportivas y educativas para formarles en habilidades sociales, hábitos saludables y conductas positivas.
La falta de ingresos o su reducción, puede derivar en un empeoramiento de la calidad de la alimentación en las familias, relacionada con el consumo de menos productos frescos, carne, pescado y fruta, pero también de las condiciones del hogar, como hacinamiento, calor o frío en la vivienda, todo ello, con repercusiones en la educación de los niños por la reducción en gastos educativos, en deporte, ocio y tiempo libre y en definitiva en la pérdida de calidad de la convivencia y a las relaciones.
Con la gestión de Cruz Roja, este proyecto ha estado destinado a paliar todas estas carencias ofreciendo por un lado a los menores, la posibilidad de llenar sus jornadas de ocio en un ambiente confortable, con juegos y talleres que les permitan aprender y a la vez disfrutar. En cuanto a las familias, se les ha ofrecido un respiro, tanto económico, al garantizarles la alimentación de sus hijos, como personal, al garantizarles que los niños estarán cuidados, entretenidos, formándose y pasándolo bien.