El PP sufre la bajada a los infiernos demoscópicos propia de un partido que ha incumplido en todo su programa electoral, incluso en el asunto aborto para los más recalcitrantes de sus electores. Ésos –y no son los únicos-, deben haber contemplado con enorme preocupación cómo la falta de iniciativa política por parte del ejecutivo de Rajoy, ha puesto al Estado contra las cuerdas en Cataluña, con una clara rebelión pero, a diferencia de lo que sucedió en la II República, detenidamente meditada y con una estrategia difícilmente contestable desde el punto de vista de la represión. La autoridad del presidente del gobierno se va por los sumideros del bienestar ciudadano, claramente agredido a lo largo de estos años –todo comenzó con los gobiernos Zapatero-, siendo Rajoy el representante político peor valorado de entre los que más predicamento social deberían tener.
En esta ocasión, la encuesta encargada por EL PAÍS para el domingo siete de diciembre de 2014, sitúa al PSOE en primer lugar con una intención de voto del 27,7 por ciento, en clara recuperación tras la elección de Pedro Sánchez como secretario general del partido. Podemos ya no es la primera fuerza en intención de voto, bajando del 27, 7 por ciento al 25,0. El caso Errejón se iba conociendo, lo mismo que el trasvase a la socialdemocracia económica de la organización de Pablo Iglesias. Todavía no se había hablado de la cuestión de la productora de Iglesias, sus sospechosos clientes y los supuestos cobros en negro del ángel de la pureza política. Puede que en el futuro se sigan produciendo bajadas en la intención de voto al partido revelación en las europeas, teniendo en cuenta que las noticias tardan en calar en la masa social, pero finalmente hacen mella. Por otro lado, no parece que los sectores más conservadores vayan a parar en la búsqueda de problemas en la organización o sus aledaños, como es el caso de Tania Sánchez , candidata de IU a la Comunidad de Madrid, ferviente partidaria de la convergencia con Podemos y pareja sentimental de Pablo Iglesias. Por cierto, que IU+ICV sube del 3,8 por ciento de noviembre al 5,6 de diciembre. ¿Paso de Podemos a IU? Creo que más que probable.
El PP, como decía al principio, continua su bajada al Hades, aunque no parece que pueda ir mucho más allá teniendo en cuenta el número de fieles que votaría a esa organización bajo cualquier circunstancia. Aún así, los conservadores pierden siete décimas respecto del barómetro de noviembre y se quedan con el 20 por ciento en intención de voto y en el tercer lugar en la preferencia de los encuestados. En cualquier partido serio –pienso-, la intención manifestada de voto más la opinión negativa generada por los entrevistados respecto de Rajoy, debería llevar al cuestionamiento en el liderazgo para las próximas elecciones. En el interior del gobierno y del partido las espadas están en alto y hay muchas voces contrarias a la posible delfín del presidente,Soraya Sáenz de Santamaría. Con clara intención de aguar la fiesta a la vicepresidente, su clara contrincante, María Dolores de Cospedal, dio un sí absoluto a Rajoy como candidato popular en La Sexta el día de la Constitución. El partido de Rosa Díez (UPyD), también experimenta una subida del 3,4 por ciento de noviembre al 4,8 de diciembre, en parte provenientes del PP, en parte de Podemos. Lamentablemente, esta muestra demoscópica no nos da los datos de CiU, Ciutadans o ERC aunque, eso sí, augura una abstención del 27 por ciento. Un 63 por ciento de participación es poco para unas elecciones que podrían ser clave pero, eso sí, hay nque tener en cuenta que aún falta un año para las mismas.