Durante el desarrollo de la última semana el representante de la empresa Finantrust mantuvo una reunión con los trabajadores despedidos del hotel Tierra Mar junto al gobierno del PP de Almonte y los partidos políticos de la oposición.
Según explica IU en nota de prensa, en este foro el representante volvió a ofrecer lo mismo que hace dos meses: “recoger curriculums y verlos con buenos ojos”. Sin adentrarse en más compromisos con el grupo de trabajadores, se habla de un determinado perfil, de idiomas y un gerente inglés que determinará quién puede acceder al puesto. De esta forma Finantrust no ofrece garantía alguna de futuro para los trabajadores despedidos por la empresa, asegura la formación política.
El concejal-portavoz de IU Daniel Martínez destacó que en ningún momento el representante se ofrece a negociar con los trabajadores y admitir que dentro de las cargas que se asume tras comprar el hotel se encuentra la plantilla del mismo.
En la reunión también recordó que existen sentencias de readmisión y un pronunciamiento del TSJA al respecto, señalando que el cierre del hotel y los despidos no proceden puesto que la actividad no arrojaba pérdidas y era viable.
Según IU, por parte del Equipo de Gobierno se volvió a mantener una “posición colaboracionista y complacista” con la posición de la empresa, olvidando así la hoja de ruta marcada por el Pleno Municipal en varias ocasiones: “por la reapertura, la readmisión y la economía local”. Tanto es así que el Concejal de Empleo ha ofertado a la empresa Finantrust estar presente en Fitur para promocionar la instalación.
Daniel Martínez recordó al representante de la empresa que ésta le debe a los trabajadores y a Matalascañas garantía y estabilidad. Durante dos años han cerrado una instalación por motivos especulativos dejando en la calle a 90 trabajadores, que menos que la empresa, porque existen sentencias al respecto, readmita a los trabajadores despedidos.
Para IU la nueva propietaria del hotel vuelve a mostrar que no es garantía alguna de futuro para los trabajadores despedidos, y que el gobierno local ya ha bajado los brazos en la lucha por la readmisión.