Durante 2014 han sido muchos onubenses los que se han animado a adoptar a animales recogidos la Diputación de Huelva, a través de un servicio coordinado por el área de Desarrollo Local, Innovación, Medio Ambiente y Agricultura y gestionado por la empresa Andaluza de Tratamientos de Higiene, S.A (Athisa). En total, han sido adoptados 180 animales, en concreto 164 perros y 16 gatos.
Según han informado a Europa Press desde este servicio, la mayoría de los animales que se adoptan son perros adultos y sin raza concreta definida.
En cuanto a la recogida, en total el servicio ha recogido 469 animales durante el pasado año 2014 –401 son perros y 68 gatos–, unas cifras que han descendido en un 31 por ciento respecto al año anterior.
La campaña de recogida de animales vagabundos va orientada fundamentalmente a retirar de los núcleos urbanos los perros abandonados y perdidos, para su traslado posterior al centro de gestión de animales ubicado en el término municipal de Valverde del Camino y que fue inaugurado en marzo de 2013.
La diputada del área de Desarrollo Local de la Diputación, Esperanza Cortés, ha realizado un llamamiento a la población para que «se tome conciencia de evitar el sufrimiento de unos seres con los que hemos compartido parte de nuestras vidas y que no se merecen un comportamiento caprichoso y egoísta de sus dueños».
Este servicio prestado por la institución provincial ha ido incorporando los principios establecidos en la normativa en vigor, la ley 11/2003, de 24 de noviembre, de Protección de los Animales, incluyendo en todos los aspectos de la gestión del servicio el concepto de protección y bienestar de los animales. Para ello no sólo se ha dotado del citado centro, sino que ha incidido especialmente en favorecer que el destino final de los animales recogidos sea la donación o la recuperación.
Por otra parte, teniendo cuenta el concepto de protección y bienestar de los animales acuñado en la mencionada ley, se van a llevar a cabo una serie de jornadas de trabajo para informar a los ayuntamientos, que son los competentes directos en la materia, sobre las obligaciones de los propietarios de los animales de compañía que residan en su término municipal de proceder a la identificación de dichos animales mediante microchips homologados, implantados por veterinarios identificadores, así como la obligación en habilitar un registro municipal que permita disponer de censos fiables, y sobre las fórmulas existentes para crearlos y gestionarlos.
Todo ello con el objetivo final de favorecer la recuperación de animales perdidos o robados y facilitar los procesos de adopciones o donaciones de los animales que se gestionen. De igual modo, se completarán estas sesiones informativas con diversas acciones de concienciación cuyo objetivo será preferentemente reducir la práctica del abandono y el fomento de la adopción de animales de compañía.