Ruperto Gallardo, candidato a la alcaldía de Huelva por Ciudadanos (C’s) ha mantenido un encuentro con el presidente de la asociación de vecinos de La Morana, Francisco González, para «conocer la realidad de este extenso barrio».
González admite que «le he mandado cientos de escritos al ayuntamiento para que nos solucionen los problemas que tenemos. Ser insistente es la única forma de que nos atiendan en algo». Además, «para que te escuchen, hay que saber de qué concejal es cada problema«. En este sentido, Ciudadanos pretende simplificar estos trámites con la figura del concejal de distrito, una persona que recoja, en sintonía con las asociaciones de vecinos, todas las necesidades del barrio y las canalice a los plenos. «Tenemos que aligerar cargas entre los vecinos y el pleno municipal. El ayuntamiento no puede ser una isla aparte de los barrios», ha admitido el candidato de C’s.
Pero, además, el presidente de los vecinos ha lamentado que «desde que se puso en marcha el programa de Cultura en los Barrios, las asociaciones de vecinos tienen una especie de venda en los ojos ya que dedican más tiempo a este programa que a supervisar la situación de los barrios y trasladarla a los plenos municipales. Tal es así, que desde el año 2007 lo que ha llegado del Ayuntamiento al barrio es irrisorio». Por lo que se crearon grupos de jóvenes que, durante un tiempo, «se encargaban de recorrer el barrio y ver los desperfectos o problemas que había pero luego no se resolvían por parte del ayuntamiento, por lo que hubo que cancelarlo porque no podíamos recompensar a estos niños», ha lamentado González. «Es un trabajo excepcional el que hacían los niños porque, además, se educaba en valores. Los niños enseñaban a los mayores a convivir mejor», ha explicado Ruperto Gallardo.
El cabezo de La Joya acoge un importante yacimiento arqueológico «que llevamos décadas reclamando que se ponga en valor», ha destacado González. Por este motivo, Ciudadanos recoge en su programa la importancia de «velar por salvaguardar y defender el patrimonio histórico, estableciendo, además, vínculos con la sociedad civil como parte activa en su protección». Para esto, «realizaremos actividades culturales de manera regular en lugares culturales protegidos, siempre respetando su integridad».
Un aspecto importante en este sentido implica «promover la difusión y el conocimiento del amplio patrimonio histórico, artístico, arquitectónico, religioso, cultural y natural en el ámbito municipal», ha asegurado Gallardo. Para esto es esencial, «promocionar visitas a los centros culturales y museos históricos y científicos, tanto de visitantes como de residentes en el municipio».