El Juzgado de Instrucción número 3 de La Palma del Condado ha decretado el ingreso en prisión para V.D.S., el detenido por cuarta vez por la unidad ‘Programa Mujer-Menor en Servicio de Apoyo Social’ (Promesas) de la Policía Local de Almonte como presunto autor de un delito de quebrantamiento de condena, al infringir una orden de alejamiento de 100 metros que tenía en vigor con respecto a su compañera sentimental M.C.B.C.
La medida ha sido acordada después de que la Fiscalía haya solicitado al juez pena de prisión sin fianza ante la reiteración de hechos de la misma naturaleza, considerando que el detenido estaba «menospreciando de manera sistemática el auto de alejamiento aunque mediara el consentimiento de la víctima», según han informado a Europa Press desde la citada unidad.
En el juicio rápido celebrado este mismo jueves en el juzgado, el detenido se ha conformado con la pena de prisión ante la contundencia de las pruebas aportadas por la Policía, ya que, en el atestado policial, estaban incluidas fotografías de la pareja realizando gestiones en común momentos antes de la detención.
Esta unidad, que es la encargada de la vigilancia y protección de esta víctima, observó a la pareja en cuestión realizando juntos tareas cotidianas, concretamente gestiones en una caja de ahorros.
En vista de los hechos y conociendo ambos que la orden de alejamiento les impedía cualquier contacto y comunicación, los agentes detuvieron al hombre como presunto autor de un delito de quebrantamiento de condena citando a la mujer en dependencias policiales para ser citada como testigo de los hechos.
Se da la circunstancia de que es la cuarta vez que esta persona es detenida por los mismos hechos, enfrentándose a una pena de entre seis meses y un año de cárcel por cada uno de los delitos de quebrantamiento.
Desde la Unidad Promesas de la Policía Local de Almonte recuerdan que cuando un juez dicta un auto de orden de protección imponiendo un alejamiento con respecto de un hombre hacía una mujer, el hecho de que la mujer consienta ese acercamiento no exime del delito.