La Consejería de Salud recomienda no consumir setas si existe duda sobre su toxicidad. En este sentido, es importante contar con el conocimiento experto antes de cocinar un hongo recogido de forma manual en el campo y recordar que el tamaño y el color son caracteres variables que pueden confundir sobre su condición de comestibles o tóxicas.
Para desmitificar los conocimientos tradicionales existentes en torno al consumo de setas y hongos, la Consejería de Salud ha publicado en su página web (www.juntadeandalucia.es/salud) una serie de consejos y recomendaciones sobre esta materia, así como las falsas creencias existentes sobre los hongos comestibles o las formas tradicionales para identificar si son tóxicas.
Por tanto, nunca se deberán consumir setas si no se está completamente seguro de que son comestibles, ya que existen hongos, incluso algunos mortales, que son parecidos a otros que no presentan riesgo para la salud. Además, no deben consumirse setas por el simple hecho de que aparezcan en un libro, ya que el tamaño y el color son caracteres variables, por lo que el consejo experto es el único viable. En Andalucía, existen varias asociaciones micológicas que cuentan con un grupo de asesores en la materia y, además, ante cualquier duda, los ciudadanos pueden acudir a su centro sanitario donde los técnicos de control oficial de alimentos podrán informarle adecuadamente.
Además, hay que tener en cuenta que existen setas que, aún siendo comestibles, pueden ser indigestas. A este respecto, se recomienda no consumir ejemplares de setas que se encuentren parcialmente descompuestas y no consumir cantidades excesivas, fundamentalmente en la cena.
Desde que comenzase el otoño, y por ende la tradición de recoger setas para ser consumidas en el domicilio, se han registrado en la Red de Alertas de Salud Pública un total de 15 intoxicaciones en la comunidad autónoma de carácter leve.
Ante una intoxicación, cuyos síntomas pueden aparecer a las pocas horas o tras varios días, hay que acudir rápidamente al centro de urgencias y alertar a las personas que pudieran haberlas consumido. Es importante contar con una muestra de los hongos consumidos para que sean analizados en el centro sanitario, acudir al centro
Falsas creencias
La web de la Consejería de Salud desmitifica, además, algunas falsas creencias para diferenciar las setas tóxicas de las comestibles tales como que las cucharas de plata se ennegrecen al contacto con una seta tóxica, que la cocción de las setas elimina su toxicidad o que aquellas de colores llamativos o las mordisqueadas por algún animal presentan riesgo para la salud, cuestiones éstas dos últimas que, en función de la zona, son características totalmente contrarias.