La Guardia Civil de Huelva ha imputado a una persona por delito de maltrato animal en la localidad de Cartaya tras la aparición de varios cepos y jaula trampa aprehendidas en su finca.
Según ha informado el Instituto Armado en una nota de prensa, un vecino de la localidad encontró a su gato atrapado por el cuello en un cepo.
En concreto, este vecino fue alarmado ante los maullidos de un gato de su propiedad de corta edad. Al salir a su encuentro, se encontró al animal atrapado en un cepo por el cuello en una de las fincas colindantes.
Por ello, una vez se llevó a cabo la liberación, las investigaciones se iniciaron por parte de los Servicios de Protección a la Naturaleza de la Guardia Civil, que inspeccionaron las fincas de la zona, hallando en una de ellas varias trampas activadas destinadas a animales.
Ante esto, se identificó al propietario de la finca, el cual «reconoció a los agentes que las trampas era de su propiedad y han sido puestas por él con el fin de matar ratas».
Los agentes procedieron a la imputación del propietario de la finca por un delito de maltrato animal, aprehendiendo los cepos y una jaula trampa que aún se encontraban activados. Las diligencias instruidas y objetos incautado han sido puesto a disposición Judicial.
Según las manifestaciones de los vecinos, han ido desapareciendo animales domésticos por la zona en los últimos meses, desconociendo los motivos de tales hechos.