El real del Rocío ha vuelto a concentrar a todos los simpecados de las hermandades rocieras un año más para la misa de Pentecostés, que ha estado presidida por el obispo de Huelva, José Vilaplana, que en su homilía ha realizado una profunda reflexión sobre la misericordia, y concelebrada también por el obispo de Jerez de la Frontera, José Mazuelos, vicario de la Celebración de la Fe y párrocos de Almonte.
El acto religioso, que se ha celebrado con cielo completamente despejado y un sol que hacía olvidar las lluvias de los días pasados, comenzaba a las diez de la mañana, aunque antes había dado la bienvenida a todos los rocieros el presidente de la Hermandad Matriz, Juan Ignacio Reales, quien pidió a todos los rocieros que colaboren para hacer «del mundo un lugar mejor para vivir».
La misa rociera ha contado con la colaboración musical del Coro Macarena de Sevilla, que a sus impecables voces y sonidos de guitarra ha unido la especial sonoridad de músicos con instrumentos de cuerda.
En la tarde de este domingo, a las 20.00 horas, se celebrará la misa de tamborileros, carreteros y coheteros.
El santo rosario, que dará comienzo a las 24.00 horas, será el preámbulo de lo que todos los rocieros, y de manera muy especial los almonteños, llevan esperaban todo un año: la salida de la Virgen del Rocío para visitar a todas y cada una de las hermandades en una procesión que se inicia a una hora indeterminada y se prolonga hasta bien entrada la mañana del lunes.
