La Junta de Andalucía ha aprobado en Consejo de Gobierno los precios de matrícula de las universidades de la comunidad autónoma para el curso 2016/2017, que quedan «congelados» por cuarto año consecutivo para los grados y se mantienen en los másteres tras la bajada del pasado ejercicio, de manera que los precios de matrícula de las universidades andaluzas son «los precios públicos más bajos de España«, ha destacado el consejero de Economía y Conocimiento, Antonio Ramírez de Arellano.
Esta medida permite dejar los precios públicos «en niveles próximos a los de 2011/2012, antes de la entrada en vigor de la normativa estatal que estableció recortes en materia de educación superior, el Real Decreto 14/2012», un Real Decreto que el consejero espera que «sea derogado» por el próximo Gobierno central, para así «volver a la situación de normalidad, que permita que grados y másteres tengan los mismos precios y sean accesibles en las mismas condiciones».
De esta forma, con la medida adoptada por la Junta, según explica Arellano, los precios públicos para el crédito de los estudios de grado, tal y como propuso el Consejo Andaluz de Universidades, se mantienen por cuarto año en 12,62 euros como cuantía única para todas las titulaciones en primera matrícula, y se sitúa en el mínimo de la horquilla fijada por el Ministerio de Educación, Cultura y Deporte (entre el 15 y el 25 por ciento del coste de la enseñanza).
Por su parte, el precio de los másteres, que el pasado año bajó en torno a un 16,5 por ciento, se congela este curso. Ello permite situar en un euro la distancia que separa el precio de un grado y el de un máster que habilite para el ejercicio de una profesión regulada (13,68 euros). También sitúa los no habilitantes en niveles cercanos a los de 2011, se mantiene igual que el pasado año con un importe de 29,57 euros. El crédito de los doctorados se fija en el mismo valor que el de los másteres habilitantes, 13,68 euros, y el de tutela académica del periodo de investigación en 60,30 euros.
El consejero, que recuerda que «por estas fechas la Junta está obligada a adoptar una decisión sobre los precios de las matrículas», destaca que afecta a más de 200.000 jóvenes andaluces y sus familias y apunta que la congelación permite «atender las expectativas de los jóvenes y posicionarse a favor de la igualdad de oportunidades».
«La educación debe ser para todos, es una medida de Justicia social y garantía de igualdad de oportunidades, y no es justo que las matriculas se conviertan en una fórmula de financiación para las universidades, como plantea el Real Decreto del Gobierno central; eso no debe ser la ruta de trabajo», considera el consejero, quien indica que esta decisión de congelar precios «consolida la línea que se había trazado en años anteriores».
A su juicio, «la educación superior sólo logra su auténtico valor si realmente la ponemos al alcance de todos», tras lo que insiste en que con esa decisión de mantener congelados los precios convierte a los precios de las universidades andaluzas en «los niveles mas bajos de grados entre universidades públicas españolas», siempre «manteniendo nuestro compromiso de cumplir el Real Decreto 14/2012 y de estar dentro de los márgenes que establece el Real Decreto, pero apostando por mejorar las condiciones de accesibilidad y eliminar la incertidumbre económica de las familias».
«Andalucía va a ser la comunidad autónoma donde estudiar es más accesible y más barato», ha resaltado el consejero, quien destaca el «esfuerzo» de la Junta y de las universidades para lograrlo. «Los jóvenes merecen expectativas ciertas para su formación y que la situación económica no sea un factor que pueda coartar sus posibilidades de futuro».
El consejero ha explicado que la estabilidad de los precios se debe principalmente a dos factores. Por un lado, se debe a un aumento de matriculados en este tipo de formación, derivado de un mayor número de graduados de las primeras promociones del Plan Bolonia, así como a la revisión del mapa de titulaciones. Por otro, se debe a las medidas de «gestión eficiente, ahorro e inversión llevadas a cabo por las diez universidades públicas andaluzas en los últimos años».
De este modo, el consejero resalta que Andalucía «seguirá siendo el próximo curso la única comunidad autónoma que aplica un solo precio en primeras y segundas matrículas, sin distinción por ramas de conocimiento», de manera que «la elección de la titulación no estará así condicionada por un coste real que, en el caso de las carreras de alta experimentalidad como Medicina, podría ser superior».
FRACCIONAMIENTO Y EXENCIONES
Ramírez de Arellano ha indicado que, junto a ello, se mantiene la posibilidad de fraccionamiento de la matrícula hasta en ocho plazos para todos los alumnos que lo soliciten, independientemente de que cumplan los requisitos económicos de las becas estatales de carácter general y movilidad.
Junto con la política de precios, el decreto recoge las medidas para reforzar la equidad y el valor del esfuerzo que se pusieron en marcha el pasado año. En esta línea se mantiene la exención de pago para las víctimas de violencia de género o los estudiantes con Premio Extraordinario de Fin de Grado, que da derecho a matrícula gratis en el primer curso de otro título oficial.
Como reconocimiento al esfuerzo personal, se establece la reducción de hasta el 70 por ciento del coste del crédito para aquellos estudiantes que superen una materia en convocatoria extraordinaria sin haber recibido docencia o sólo parcialmente. Esta iniciativa contribuye a paliar el progresivo aumento del coste de una matrícula, fijado por el Real Decreto 14/2012, a aquellos estudiantes que deban inscribirse más de una vez en una asignatura para superarla.
Lamenta que en el conjunto de España «las familias son las financiadoras principales del sistema universitario, y en algunas universidades de otras comunidades se están triplicando precios de matrícula», mientras que en Andalucía «no vamos a dejar a nadie atrás por situaciones y circunstancias económicas».