El Trofeo Ciudad de Moguer, que hace cinco años que no se celebraba, alcanzará este viernes su edición número 35 a partir de las 20.00 horas en el Pabellón Cubierto Zenobia Camprubí, que este día cumple 25 años desde su inauguración oficial. En él se medirá el Club Balonmano Pedro Alonso Niño de Moguer ante un rival de Asobal como el Ángel Ximénez. Para esta cita el entrenador del PAN Javier Socías ha hecho hincapié en que “la afición debe ser el octavo jugador y disfrutar en el pabellón con este trofeo”. El técnico amarillo Javier Socías ha comentado que el Trofeo les llega “prontísimo en esta pretemporada desde el punto de vista deportivo y competitivo, pero también es verdad que es el momento ideal porque vuelve a celebrarse el Trofeo de Moguer de balonmano, que cumple 35 ediciones y estaba en el aire pese a tener mucha solera a nivel andaluz y estaba casi extinguido. El poder participar en su recuperacion no llega pronto”. Al respecto ha reconocido que desde que se confirmó la celebración de esta cita “cambiamos radicalmente la pretemporada, que estaba planificada de una forma y la hemos variado porque lo que hay que hacer cuando se juega este trofeo en tu casa es disputarlo”. Al respecto ha detallado que “no se ha bajado el nivel de carga física pero también ha habido carga técnica y táctica. Hemos hecho muchos ejercicios de carrera y preparación física en pista con balón y ritmo de juego y en definitiva hemos hecho una adaptación para intentar competir con un equipo como Puente Genil, que es de Asobal y que lleva desde primeros de agosto con una dedicación exclusiva”. Pese a lo a priori desequilibrado del choque, Socías ha asegurado que “a mí me encanta medirme a un Asobal y el objetivo es que en compitamos y el equipo salga victorioso de este reto, aunque sea contra sí mismo al dar un nivel de juego suficiente para que la gente que venga vea balonmano. Es complicado pero no imposible”. El entrenador del PAN conoce lógicamente al segundo técnico de su rival este viernes, Javier Ollero, exjugador y miembro del cuerpo técnico, y también tuvo “la gran suerte” de enfrentarse en varias ocasiones como jugador al primer técnico, Quino Soler.
Del equipo cordobés ha detallado que “afortunadamente con los apoyos que viene teniendo en los últimos años está haciendo plantillas competitivas y con solvencia, que le permiten competir en Asobal con relativa tranquilidad. Nunca se puede decir tranquilidad, pero tiene grandes jugadores y la diferencia con los nuestros es grande, pero ambos estamos en pretemporada y estos partidos amistosos son para probar cosas”. Ha agregado que “nos puede servir de piedra de toque en aspectos tácticos en defensa y ataque y para ver si somos capaces de dar el nivel suficiente para pelearle el partido a un rival de categoría superior”. Socías ha insistido en que “como motivación personal yo siempre he estado mirando hacia arriba. Llevo 30 años viviendo el balonmano de una forma u otra desde que empecé y en diferentes etapas y siempre, desde que recuerdo, lo que me enganchó del balonmano de verdad es estar siempre mirando hacia arriba y la mejor forma de ver si podemos es midiéndonos a un rival de alto nivel”.