Huelva ha vivido este jueves la jornada más importante y emotiva de sus fiestas patronales con la subida de la imagen de su patrona, la Virgen de la Cinta, desde la catedral hasta su santuario.
Por la mañana, a las 10.00 horas, tenía lugar la celebración en el santuario de la misa en honor de Nuestra Señora de Guadalupe y a las 12.00 horas se procedía en la catedral a la Solemne Función Principal, presidida por el obispo de Huelva, José Vilaplana.
El momento mágico de la jornada se produjo a las siete de la tarde, con el inicio del Traslado Popular desde la catedral hasta el santuario de La Cinta. El recorrido con la imagen de la Virgen de la Cinta, que ha contado con el acompañamiento musical de la Banda de Música ‘Nuestra Señora de las Mercedes’ de Bollullos del Condado, se iniciaba en la Plaza de la Merced y proseguió su paso por el Paseo de la Independencia, la avenida de Cristóbal Colón, la Carretera de Gibraleón y la Cuesta del Humilladero, hasta llegar a su templo acompañada del inmenso fervor popular de los onubenses.
ACTUACIONES MUSICALES
Por otra parte, las actuaciones de La Orquesta Mondragón, Rosám y Blasphemium cerraban este jueves el cartel musical organizado por el Ayuntamiento de Huelva, a través de la Concejalía de Cultura, Turismo y Promoción de Huelva en el Exterior, y que ha reunido en la capital onubense a casi una veintena de artistas durante tres intensas jornadas.
A las 22.00 horas, el dúo Rosam ha sido el encargado de abrir la velada musical con un concierto para todos los públicos y donde la potente voz de su cantante, la onubense Rosa Cabrera, ha brillado sobre el escenario de La Orden.
Posteriormente, tras el castillo de fuegos artificiales que tenía lugar una vez finalizado el Traslado Popular que ponía el broche de oro a estas fiestas de 2016, continuaba la programación musical en esta última noche de La Cinta con la esperada actuación de la Orquesta Mondragón, a la 1.40 horas.
El punto y final musical, bien entrada la madrugada, lo ha puesto la banda onubense de black metal sinfónico Blasphemium.