La Junta de Gobierno del Ayuntamiento de Huelva dará luz verde este miércoles al proceso de revocación de licencias de taxi para reestructurar y revitalizar un sector cuya oferta está saturada en la ciudad. El plazo para los taxistas que estén interesados puedan acogerse a esta opción será de ocho días hábiles.
Como ha explicado el concejal de Seguridad Ciudadana, Movilidad y Tráfico, Enrique Gaviño, “en cumplimiento de nuestro compromiso con el sector, hemos llegado a este punto después de abordar esta reivindicación en constante diálogo con las dos gremiales y en diferentes convocatorias de la Mesa del Taxi que se vienen celebrando desde el principio del mandato. Por primera vez en nueve años -ha recalcado el edil- este Ayuntamiento ha dotado de presupuesto el necesario rescate de licencias”.
La retirada de licencias conllevará una compensación económica de 49.681 euros para sus titulares. Gaviño ha precisado que esta indemnización se ha fijado en base a un informe económico que toma como referencia el valor medio de las transmisiones de licencias de taxi autorizadas por el Consistorio en los últimos 12 meses.
Entre los criterios de valoración que se han establecido por acuerdo unánime de la Mesa del Taxi para la preferencia de las licencias a revocar, priman el fallecimiento del titular, la edad, años de servicio o incapacidad.
“Se trata de alcanzar progresivamente la ratio de 1,45 licencias de autotaxi por cada mil habitantes, tal y como fijan la Ordenanza Municipal del Taxi de Huelva y la Ley Andaluza que regula este ámbito. De este modo -ha señalado el edil- daremos más viabilidad y sostenibilidad a este servicio de transporte público, a tenor de la demanda existente en la ciudad. La revocación de licencias era una medida fundamental para redimensionar un sector del que dependen muchas familias de Huelva y que viene atravesando tiempos difíciles”.
Con este proceso, el equipo de Gobierno municipal da cumplimiento, además, a una moción aprobada en el pleno del pasado mes de enero por unanimidad de todos los grupos políticos, cuya finalizar era llevar a cabo la reestructuración del sector revisando las licencias desde el órgano de participación de la Mesa del Taxi.
