La Inspección de Trabajo ha urgido a la Junta de Andalucía para que proceda a la reparación del sistema de climatización de las delegaciones de la Junta de Andalucía en Huelva, cuyo mal funcionamiento afectó este pasado verano a los trabajadores, que llegaron a soportar temperaturas de hasta 29,2 grados centígrados, con lo que superó la normativa vigente que recomienda temperaturas que oscilen entre los 17 y 27 grados.
El requerimiento de Trabajo se ha producido tras la denuncia que interpuso en julio el sindicato CSIF, en la que se indicaba cómo los sistemas de climatización del edificio multifuncional de la Delegación del Gobierno y de la Delegación Territorial de Medio Ambiente y Ordenación del territorio no estaban funcionando. En ambas delegaciones desarrollan su labor alrededor de 300 trabajadores de la Junta de Andalucía.
Con anterioridad a la denuncia ante la Inspección de Trabajo, el sindicato se puso en contacto con ambas delegaciones para conocer que estaba ocurriendo con los aparatos de climatización y las medidas que estaban tomando para su reparación. Tras comprobar que la situación estaba empeorando en el edificio, los delegados de Prevención de Riesgos Laborales llevaron el caso al Comité de Seguridad y Salud de la Administración General de la Junta de Andalucía en Huelva, y esperado un tiempo prudencial, y escuchada las quejas de los trabajadores, el pasado mes de julio los responsables sindicales del sector pusieron en conocimiento de la Inspección de Trabajo los hechos.
Según consta en la resolución, en las oficinas del edificio multifuncional se llegaron a registrar temperaturas de 29,2ºC superando con ello lo indicado en la normativa, suponiendo la exposición a estas temperaturas un riesgo para la seguridad y salud de los trabajadores, ya que la misma en los locales donde se realicen trabajos sedentarios propios de oficinas o similares tiene que estar comprendida entre los 17 y 27ºC.
Estas anomalías con los aparatos de climatización se vienen soportando por los trabajadores en el edificio desde hace unos años, pero este año ha sido más grave que en otro, y con motivo de las altas temperaturas en los meses de julio y agosto y ante la excepcional situación del no funcionamiento del sistema de climatización, las delegaciones establecieron un horario extraordinario, de modo que la salida de los trabajadores se fijó a partir de las 13.30 horas.
La Inspección de Trabajo finalmente requiere a la Administración General de la Junta de Andalucía para que «de manera inmediata proceda a la adopción de las medidas que considere pertinente, a fin de que las condiciones ambientales en la Delegación del gobierno sean idóneas para los trabajadores».