Bajo el lema “No disfraces de mal rollo tu diversión” el Ayuntamiento de Isla Cristina, a través de la Concejalía de Adicciones, ponía en marcha este mares la campaña para la prevención de venta de alcohol a menores durante el Carnaval.
Dicha campaña que trata de evitar el excesivo consumo de alcohol en jóvenes, así como evitar la venta de alcohol a menores durante los carnavales está orientada, en especial, a vendedores, camareros y dispensadores de bebidas alcohólicas, así como a peñas y asociaciones carnavaleras para que éstas, a su vez, hagan de altavoz y les lleve el mensaje a sus socios. Su principal objetivo no es otro que informar a los jóvenes sobre los peligros del consumo excesivo del alcohol, así como a los propietarios de establecimientos que venden a menores, algunos sin el más mínimo control de la edad.
Con la participación de la Asociación de Carnavaleros Isleños (ACI), la Federación Isleña de Peñas y Asociaciones de Carnaval (FIPAC) las Delegaciones Municipales de Adicciones la campaña se engloba dentro del Programa “Isla Cristina ante las Drogas”, subvencionada por la Junta de Andalucía y a la que Isla Cristina está acogida desde 2008.
En este sentido y como explicó la Concejala de Adicciones, Nerea Ortega, “desde el Ayuntamiento siempre ha habido una sensibilidad especial por combatir cualquier tipo de drogodependencia, sobre todo entre los jóvenes, tanto a nivel comunitario, familiar como educativo», y con el fin de continuar desarrollando nuevas líneas de actuación, junto con la Diputación Provincial de Huelva, se ha puesto en marcha esta actividad, enfocada a la información y divulgación hacia la ciudadanía sobre los perjuicios del consumo, en esta ocasión, del alcohol, «intentando minimizar al máximo sus efectos y retrasar la edad del inicio de la toma de drogas, tanto entre los jóvenes, como en adolescentes».
Como siguió anunciando la concejala, esta campaña, en concreto, «va dirigida a menores de edad que durante los carnavales consumirán alcohol y otras drogas, así como a todas las peñas y asociaciones que, durante las fiestas, instalan barras que expenden alcohol». Y aunque para la concejala es importante que los jóvenes se diviertan, «también es necesario proteger a estos menores», por ello, desde la concejalía de Adicciones, se va a repartir en la ciudad una guía que recoge una serie de pautas para «saber cómo actuar cuando se detecta que un menor pide una bebida alcohólica».
Por todo lo explicado, ya se distribuye la guía donde se recogen los principales objetivos de la campaña y se especifica que “los Carnavales de Isla Cristina son ideales para pasar buenos momentos con nuestros vecinos y amigos, y a la vez, son un motor de promoción cultural, turística y económica de nuestro pueblo, sí pues ¡mejor que nadie arruine los carnavales!”.
Con tan solo seis normas se pretende poner en claro lo perjudicial del consumo y entre las que se encuentran una que le pide a los comerciantes que especifiquen, claramente y en lugar visible, que “no se dispensan bebidas alcohólicas a menores”, explicándoles a los menores que lo soliciten que “es un delito y muy perjudicial para su salud”, evitando siempre la confrontación directa.
Y aunque la guía reconoce que en el tumulto de una barra llena de personas es difícil percatarse de las edades, “la experiencia del vendedor o camarero es fundamental” pero si la duda persiste, “y no sabemos seguro que es mayor de edad, pidamos el DNI”. Dificultar la venta es importante porque disuade, ya que en supermercados y tiendas es más dificultoso para ellos adquirir bebidas alcohólicas.
Por último, la guía recoge llamar al 112 en caso de ser conscientes de posible coma etílico o altercados por el consumo de alcohol, aunque es preferible “poner las bases previas para que estos casos sean los menos posibles”.