El Punto de Encuentro Familiar (PEF) de Huelva atendió el año pasado a 160 menores de edad, según el balance de este recurso público que gestiona la Consejería de Justicia e Interior y al que llegan por derivación judicial casos de progenitores e hijos en situaciones de conflicto y problemas de convivencia.
El PEF constituye un espacio idóneo y neutral para garantizar el cumplimiento de los regímenes de visitas, comunicación y estancia de los menores con sus progenitores o familiares que no dispongan de su custodia, determinados por los órganos judiciales.
Durante el pasado año, el equipo multidisciplinar que trabaja en el dispositivo del Punto de Encuentro Familiar de esta provincia tramitó un total de 77 expedientes que afectaban a menores con situaciones de conflictos familiares.
La Junta de Andalucía puso en marcha en el año 2009 los Puntos de Encuentro Familiar, donde se facilita un servicio temporal, excepcional y de carácter gratuito, con el objetivo de propiciar la normalización de la convivencia familiar. La duración de la intervención está limitada a un período máximo de 18 meses, prorrogable mediante resolución del órgano judicial correspondiente.
Además, en estos recursos se ofrece orientación psicosocial individual y familiar para que las personas usuarias mejoren sus relaciones y superen la situación de conflicto familiar que motivó la derivación judicial a los PEF.
Para los casos de violencia de género, que originan en torno a casi un tercio de las intervenciones de los PEF, en estos recursos se adoptan medidas que evitan el contacto entre agresor y víctimas, además de fijar un protocolo horario que garantiza en todo momento el cumplimiento de las medidas judiciales impuestas a la persona investigada o penada.
Los PEF cuentan con un equipo técnico multidisciplinar formado por psicólogos, pedagogos, trabajadores sociales y educadores, especialmente formados para la atención de casos de conflictividad familiar.