El Ayuntamiento de Huelva, a través de la Concejalía de Urbanismo y Patrimonio Municipal, exige al titular del número 4-D de la calle Concepción, donde se ubica la farmacia, que se conserve integramente su fachada, incluyendo los azulejos y todos los elementos arquitectónicos de esta construcción que data de 1857.
Como ha indicado el portavoz del equipo de Gobierno municipal y responsable de esta Concejalía, Manuel Gómez Márquez, aunque este inmueble declarado en ruinas “no esté catalogado ni cuente con protección patrimonial a nivel jurídico, queremos que la fachada se mantenga por su sabor a la Huelva antigua y su tipismo dentro del Casco Histórico de Huelva”.
El concejal ha recordado que este edificio fue declarado en ruinas, por sentencia firme, hace ya cinco años, “sin que el anterior equipo de Gobierno interviniera previamente para exigir su rehabilitación y evitar que se llegara a este avanzado estado de deterioro. Después de tantos años de abandono, por la seguridad de los propios ciudadanos hemos tenido que instar al derribo de la estructura del edificio, que lamentablemente presenta daños irreversibles; habiéndose ordenado, igualmente, la puesta en marcha de medidas de seguridad provisionales. Ahora bien, -ha enfatizado Gómez Márquez-, para nosotros es fundamental que se recupere todo lo recuperable y por ello exigimos que esta fachada del siglo XIX se mantenga y se ponga en valor, aunque el inmueble quedara excluido en su día del Catálogo de Edificios Protegidos del PGOU”.
El número 4-D de la calle Concepción forma una unidad funcional con el edificio colindante, con el que comparte escalera, habiéndose declarado en en ruina en 2013 todo el conjunto, con el requerimiento de restaurar la fachada en la finca anexa. Ahora esa exigencia se amplía al edificio de la farmacia con el objetivo de que se preserve su fisonomía, no mediante una reconstrucción, sino mediante rehabilitación.
Como medidas preventivas de seguridad, en los últimos días, a instancias del Ayuntamiento, se ha procedido a limitar el acceso con un vallado de obra, se ha colocado un paso protegido para acceder a la farmacia, se han apuntalado huecos y forjados y se ha instalado en la fachada del inmueble una malla retenedora.