Fruto de las investigaciones de la Tesis Doctoral titulada “Contribuciones desde la Arquitectura y la Ingeniería a los edificios de energía mínima”, realizada por Sergio Gómez Melgar y dirigida por los doctores Miguel Ángel Martínez y José Manuel Andújar, se ha desarrollado en la Universidad de Huelva una metodología y un sistema hardware/software que la implementa para medir de forma sencilla y barata el calor que escapa o entra a través de las paredes de las viviendas de un edificio completo o incluso una manzana de edificios. Los resultados de este estudio han sido publicados en la prestigiosa revista Sensors, referencia mundial en la ciencia y tecnología de sensores y biosensores.
El consumo de energía de edificios (residenciales, públicos, oficinas privadas, centros comerciales y otros) representa en España más del 40% del total de la energía consumida. Esto equivale a decir que una buena parte de los gases de efecto invernadero se genera debido al consumo energético en la edificación. Por tanto, una mejora en la eficiencia energética en la edificación no solo reduce costes para sus usuarios, sino que contribuye también a mitigar el impacto del cambio climático.
Habitualmente, el consumo de energía de los edificios está condicionado por su uso y el mantenimiento de sus instalaciones, así como por sus características constructivas, principalmente aislamientos. Si bien es cierto que la normativa actual en la edificación está comenzando a ser más estricta en lo que se refiere a eficiencia energética para vivienda nueva, “la mayoría del parque edificado y en uso ha sido realizado con normativas de eficiencia energética muy laxas y, en una buena parte, dependiendo de la antigüedad de la vivienda, con ninguna. Esto hace que exista una enorme cantidad de edificios que necesitan ser rehabilitados energéticamente, con objeto de conseguir niveles de eficiencia que estén en la línea de los requerimientos actuales”, explican los investigadores.
Dependiendo del estado inicial de la vivienda y la extensión y calidad de la rehabilitación energética que se lleve a cabo, su eficiencia energética puede mejorar hasta un 50%. Como media, se estima que una buena rehabilitación energética mejora la eficiencia un 30%.
La mejora del aislamiento en la envolvente o “piel” del edificio (paredes con el exterior) es fundamental para el incremento de su eficiencia energética. De hecho suele ser la acción más importante para ello. Este aislamiento se mide mediante una variable denominada “transmitancia térmica” o valor U. Cuanto mejor aislada está la envolvente de un edificio menor es su valor U.
La metodología actual para medir el valor U está basada en la medida directa de la transferencia de calor a través de la pared en consideración. Este método es muy costoso (unos 8.000 € por equipo de medida para un solo punto), lento y no permite realizar varias medidas a la vez. Por citar un ejemplo, “realizar una medida en cada vivienda de un edificio de 40, tomaría con un solo equipo no menos de 4 meses. Hacerlo con más equipos podría ser inviable económicamente”, afirman los autores del estudio.
Como resultado de las investigaciones llevadas a cabo por el Grupo de Control y Robótica (TEP 192) de la UHU, dirigido por el Catedrático José Manuel Andújar, en la Tesis citada se ha desarrollado una metodología físico-matemática, que ha sido implementada en un sistema hardware/software modular, configurable por el usuario según sus necesidades, inalámbrico y que es capaz de llevar a cabo todas las medidas del ejemplo anterior en no más de 72 horas y a un coste por medida muy inferior en comparación con los dispositivos actuales.