Trabajadores del hospital Juan Ramón Jiménez de Huelva han realizado este mediodía una concentración de protesta contras las agresiones que vienen sufriendo de manera recurrente por parte de algunos enfermos o familiares.
La concentración se ha realizado en las puertas del servicio de Urgencias, donde ha tenido lugar la última agresión, en la que un paciente atacó de manera brutal a un vigilante de seguridad, que debió ser atendido por la rotura que sufrió en el labio y los múltiples golpes que recibió, por el simple hecho de pedir a un familiar que abandonara la zona en la que estaba, la de servicios mínimos, al no precisar el enfermo acompañante.
Bajo el lema ‘la agresión no es la solución’, los trabajadores han querido mostrar su rechazo a las agresiones y su solidaridad con todos los compañeros que han sufrido algún tipo de agresión, tanto física como verbal, algo que se está convirtiendo en uno de los mayores problemas a los que tienen que hacer frente.