El concejal del Ayuntamiento de Huelva Ruperto Gallardo pedirá a través de una moción en el próximo Pleno Municipal, que el equipo de Gobierno aumente el presupuesto del Plan Municipal de Adicciones en una cantidad equivalente a lo recaudado a través de sanciones o multas tramitadas por Policía Local y Medio Ambiente.

“Las Estrategias diseñadas en el Plan Municipal de Adicciones que hemos conocido hace pocas fechas, tienen una importante función de prevención , formación e información” señala Gallardo. “Contienen áreas y programas dirigidos a colectivos de jóvenes, y se han diseñado campañas dirigidas a prevenir el consumo de alcohol entre los mismos”. Sin embargo el Plan de Adicciones, según reflejan los presupuestos, sólo dispone de 10.000 euros anuales para implementar todas sus actividades.

“Obviamente, desde la Policía Local se debe mantener la labor de vigilancia y prevención de actividades ilícitas, como son la venta de alcohol por parte de comercios y bares a menores, así como el consumo de estupefacientes. El área de Medio Ambiente debe incrementar la actividad sancionadora, evitando con ello que se llegue a la sensación de “impunidad” en los comercios. La colaboración con agentes de la sociedad civil, así como con el tejido empresarial hostelero debe seguir siendo máxima”, señala Ruperto Gallardo en su moción.
“Pero el objetivo de mi moción no es solo ése, sino el de dotar de mayor presupuesto al Plan Municipal de Adicciones”, prosigue.

“Al igual que a nivel estatal los bienes decomisados a las redes de narcotráfico revierten en planes de lucha contra la droga, a través del Fondo de Bienes Decomisados, las cantidades dinerarias recaudadas con este tipo de sanciones municipales deben revertir aumentando la dotación del Plan Municipal de Adicciones. Simplemente se trata de consultar con los departamentos sancionadores qué cantidad se ha impuesto en multas, y dedicar un importe similar al Área de Políticas Sociales del Ayuntamiento”

“El escenario ideal sería aquél en el que lo recaudado fuera cero, porque nadie incumpliera la norma. Como desgraciadamente no se da esta circunstancia, este dinero debe servir para disminuir los incumplimientos a través de la prevención, formación e información”, concluye Ruperto Gallardo.