El presidente del Parlamento de Andalucía, Juan Pablo Durán ha pedido este miércoles a los Grupos Parlamentarios que «recuperen el espíritu de consenso» del Pacto de Antequera de 1978 porque «Andalucía se juega mucho» y ha señalado que son necesarias «voluntad política y más recursos para prestar mejor los servicios a las personas».
“Les pido que pongan su acento, el acento de Almería, Cádiz, Córdoba, Granada, Huelva, Jaén, Málaga y Sevilla; el acento de cada una de sus posiciones ideológicas, al servicio de los andaluces y andaluzas”, ha dicho Durán. En el pleno institucional celebrado hoy con motivo del Día de Andalucía, el Presidente ha recordado a Plácido Fernández-Viagas y ha pedido a los parlamentarios andaluces que se mantengan «unidos en lo esencial» para llevar una posición común en la reforma del sistema de financiación autonómico.
En este sentido, ha apuntado que la puesta en marcha de un Grupo de Trabajo específico para abordar en el Parlamento este asunto ha sido un acierto y de cara a la tramitación, que continuará elevando el informe aprobado a la Comisión de Hacienda y Administración Pública, ha reclamado generosidad y altura de miras para alcanzar al final un acuerdo satisfactorio.
“Nos jugamos mucho”, ha manifestado Durán. “No se trata del reparto de más dinero para los territorios. Financiación significa más recursos para prestar mejor los servicios a las personas, que son sus derechos y que están recogidos en nuestro Estatuto de Autonomía”.
Durán ha comenzado su intervención recordando que este 2018 se cumplen cien años de la aprobación de la bandera y el escudo como símbolos de Andalucía, en la Asamblea Regionalista de Ronda de 1918, en la que se empezaron a fijar además los principios del pensamiento de Blas Infante, precursor del autogobierno andaluz, sobre la historia autonómica, que arrancó pidiendo “igualdad”, tal y como refleja el Manifiesto de Córdoba de 1919.
Otra de las efemérides que ha marcado la autonomía de Andalucía es el aniversario de la Constitución Española de 1978, que Durán ha definido como la “gran columna vertebral” de la vida política, social y económica, que ha permitido el mayor tiempo de paz, democracia, libertad y progreso económico y social, y que las regiones que lo desearan pudieran autogobernarse en el marco de la indisoluble unidad de España, como dice su artículo 2.
Cuarenta años después, Durán ha dicho que el modelo territorial de España es mejorable y que las nuevas generaciones tienen derecho a exigir cambios institucionales, pero que toda reforma debe plantearse desde tres premisas básicas: el mismo nivel de consenso que se alcanzó en 1978, pensando España para las próximas décadas; no hacer tábula rasa con el pasado, sino incorporar elementos que fortalezcan los derechos sociales; y en tercer lugar, tener en cuenta a Andalucía, que representa casi la cuarta parte de la población de España, y desempeña un papel de equilibrio entre las diferentes posiciones.
Durán ha subrayado que Andalucía seguirá fomentando un modelo territorial de carácter integrador, con la meta de conseguir un desarrollo sostenible, con cohesión social, en el que nadie se quede atrás; y «seguirá alzando la voz frente a los que están por la división, la imposición y el enfrentamiento y, desde posiciones insolidarias, cuestionan la Estructura Territorial de España». En este punto, ha asegurado que quienes componen el Parlamento, «no van a anteponer intereses distintos a la suprema lealtad a Andalucía», por lo que ha reclamado la unidad de las fuerzas políticas y de la sociedad civil andaluza, porque el pueblo andaluz “no perdonaría a quienes la rompieran por lealtades equivocadas”.
El presidente del Parlamento ha destacado que Andalucía tiene estabilidad política, presupuestos aprobados y datos económicos positivos de creación de empleo, balanza comercial y de exportaciones que hacen mirar al futuro con optimismo y que 2018 puede ser “clave”. Sin embargo, ha advertido de que Andalucía no permitirá que en el nuevo presupuesto de la Unión Europea se recorten los fondos agrarios y de cohesión como consecuencia del Brexit; y seguirá alzando la voz para recuperar una Europa de acogida porque cientos de miles de personas ven en este continente la única esperanza para salvar sus vidas.
Durán ha abogado además por la aplicación efectiva de la Carta Social Europea con el objetivo de acabar con la desigualdad, asegurar el reparto de la prosperidad, apostar decididamente por la educación y el empleo de calidad, y poner en marcha políticas efectivas para erradicar la violencia machista y para garantizar una igualdad real entre hombres y mujeres, también en salarios y empleo.
En su intervención, el presidente se ha referido a las descalificaciones al acento andaluz y ha exigido respeto «para todos los acentos y lenguas de España y también para la forma de manera de hablar y comunicarse de los andaluces», y ha recordado que en el artículo 10 del Estatuto de Autonomía para Andalucía se recoge «la defensa, promoción, estudio y prestigio de la modalidad lingüística andaluza en todas sus variedades».
“Ante cualquier ataque a nuestra tierra, seguiremos alzando la bandera blanca y verde para recordar cómo somos y lo que representamos. No vamos a relajarnos en la defensa de nuestros derechos y de nuestras instituciones. No vamos a retroceder. No vamos a perder lo que hemos conseguido con el esfuerzo y sufrimiento de muchas generaciones”, ha afirmado el presidente de la Cámara andaluza.