La puesta a punto de un vehículo no es suficiente para su buen cuidado. La gran mayoría de los problemas comunes del coche pueden solucionarse sólo con revisiones periódicas y sabiendo que siempre hay opciones de disgusto. En este artículo queremos hablar de todas esas cosas que podemos evitar simplemente mirando bien. ¿Te gusta conducir? ¡Cuida tu coche en condiciones!
El coche es uno de los vehículos que más usamos a diario. Junto con los medios de transporte públicos tales como el metro o el autobús éste está con nosotros para los trayectos que nos llevan al trabajo, ir a la casa de la playa un fin de semana o muchas otras cosas de diario para las que sin darnos cuenta, es único e imprescindible.
El cuidado de nuestro coche es fundamental para que todo salga perfecto cuando vamos en carretera y no tengamos ningún problema que después haya que lamentar. Recuerda que ante todo vas en una caja donde tu seguridad es lo primero y debes advertir en todo momento de lo que necesitas para que todo esté en orden. ¿Sabes las precauciones que hay que tener con el vehículo?
¿Qué tipo de fallos puede tener un vehículo?
Como máquina que es, el coche puede fallar en cualquier momento. Aunque lo cuidemos no podemos controlar algunos mecanismos pero precisamente por eso debemos estar alerta de todo lo que le hace falta y cuáles son sus necesidades más vitales para que cuando salga por carretera, nosotros no tengamos ningún problema.
Para los conductores que tampoco tienen demasiada idea sobre el medio en el que van pero sí están al día de la conducción como tal, dejamos una serie de averías que podemos remediar siempre y cuando le gastemos empeño y sepamos en todo momento de qué precisa el vehículo en sí:
Cuidado al repostar
Algo tan sencillo como repostar nos puede jugar una mala pasada. Saber diferenciar entre el gasóleo y la gasolina puede librarnos de un gran disgusto. Si nos equivocamos por un descuido de lo más simple podemos buscar un problema al motor que nos llevará a gastar hasta 400€. ¡Ve con cuidado cuando estás en el surtidor de combustible!
Mal mantenimiento
Las revisiones deben de ser ordenadas y periódicas. El mal mantenimiento de un vehículo puede suponer un disgusto para el conductor y por ello debemos cuidar cada detalle para que todo salga bien. Estar al día de la copela del amortiguador puede hacer que un gran problema futuro se quede en uno muy pequeño.
Cuidado en el camino
Los caminos pueden ser muy traicioneros para el vehículo. Es importante que cuidemos las ruedas de por dónde vamos puesto que una mala gestión del trayecto nos puede destrozar el coche de manera paulatina. Problemas como el de la vibración del volante pueden llegar un día cualquiera porque hemos reventado los neumáticos así y los tenemos en mal estado. ¡No dejes que puedan contigo!
¿Cuánto cuesta mantener nuestro coche con buena salud?
El cuidado del coche de manera ordinaria es mucho más barato que cuando lo dejamos y después vamos a un taller para que nos haga el repaso tras años sin acudir. De la misma manera que como cuando llevamos años sin ir al dentista la limpieza te puede salir muy cara, con nuestro vehículo pasa igual.
Algunas averías del coche son tan sencillas que si hacemos un repaso previo de lo que le hace falta en un taller con un profesional puede que ni siquiera lleguen a ocurrir. Sin embargo, con el paso del tiempo ésta se puede volver contra nosotros y es por ello que debemos invertir más dinero de la cuenta en su recuperación.
¡No te lo pienses! Si ves que tu coche tiene pequeños conflictos lo mejor es que lo lleves al taller cuanto antes puesto que estamos hablando de un arreglo que se puede solucionar y que quizás, pasado el tiempo, te cueste mucho más caro o sea irreversible. ¿Vas a dar cancha a esto?