(Texto: Paco Morán) La búsqueda de recursos económicos para el Decano se ha convertido en el principal trabajo de los políticos relacionados con el Recre. La espada de Damocles de los pagos innegociables a las instituciones, jugadores, entrenadores y empleados en los meses venideros hasta mayo de 2019, está encima. Y es que este Recre tiene una rémora muy importante tras la devastación ‘Comática’ que dejó el anterior dueño del Decano.
Todos estamos alerta para ver que cada ejercicio mensual sean pagadas las nóminas para evitar que los impagos anulen esa ilusión que ha despertado el Recre de Salmerón y Carazo. Y lógico que uno reciba la pregunta del aficionado que quiero responder desde la deducción: Paco, ¿cree que pagarán a los jugadores?
Si hay algo bueno para ser optimista, es que hay elecciones en unos meses. Y ya sabe el ciudadano que cuando llegan las elecciones, el político limpia las calles, inaugura plazas, tapan agujeros económicos en asociaciones, tiran muros de separación entre vías y carretera…En definitiva, hay elecciones y, dónde antes no había, seguro que ahora habrá.
Apostar a que los jugadores cobrarán todos los meses, tal vez sería atrevido aseverarlo, si bien basándome en las elecciones municipales, digo que los jugadores cobrarán todos los meses. Pero aparte de ese complicado trabajo de buscar recursos económicos, el Recre sigue teniendo encima la pasada loza del contrato-trampa.
Ya ni tan siquiera el patrocinio de los 500.000 podría ser aprobado por la oposición, dado que no están dispuestos los concejales a meter 75.000 euros de esa partida de los onubenses en el bolsillo de Juanma López. Podría pasar lo mismo con otras empresas, que conscientes de ese contrato, igual pensarían si enriquecer a Eurosamop a costa de su generosidad con el Decano.
Hay muchas cosas que seguir arreglando en el Decano, si bien ese maldito contrato hasta 2027 debe ser un trabajo prioritario. Ha de romperse el ‘contrato-estafa’, vía negociación o impugnación. El Recre está preso de ese contrato y tapa muchas vías de ingresos. Y vías de venta ya lo hemos visto. Nadie comprará el piso con el inquilino dentro.
Apelar a la generosidad de Juanma López para que renunciara a esa cláusula, sería un intento en vacío o tal vez no. Por intentarlo nada se pierde. Entiendo que todo ha de pasar por una negociación de ruptura para permitir al Decano ser libre para actuar en función de sus necesidades