La Junta de Personal del Hospital Infanta Elena de Huelva ha mostrado este martes, 29 de enero, su apoyo a los trabajadores de este centro hospitalario en su reivindicación para que no se elimine el servicio de autobús colectivo que venía funcionando en los últimos 33 años. El servicio, según anunció en su día la gerencia, iba a desaparecer el 1 de enero, aunque posteriormente se amplió el plazo hasta el 1 de febrero. Ante esta situación este pasado lunes, 28 de enero, ha tenido lugar una asamblea de trabajadores del hospital, en la que el gerente informó de la supresión definitiva del transporte colectivo.
La eliminación del servicio se realiza, según explica la junta de personal, «supuestamente en base a las indicaciones de la Intervención Provincial, que indicaba que la contratación de dicho servicio no se adecuaba a la normativa vigente y la existencia de un transporte urbano público que cubría dicha necesidad». La Junta de Personal, convocó con fecha 21 de Diciembre una concentración de trabajadores que obligó a la Dirección Gerencia a prorrogar un mes dicho servicio de transporte, mientras se buscaba una solución definitiva al problema suscitado.
Desde entonces se han sucedido:
· Concentraciones de trabajadores los días 11 y 18 de enero.
· Denuncia en Inspección de Trabajo formulada por un Delegado de Prevención del centro, de cuya resolución estamos pendientes.
· Recogida y entrega de más de 600 firmas de trabajadores, contra la supresion del transporte colectivo.
· Escritos registrados al Gerente del HIE, al Delegado de Salud, al Interventor Provincial y al Presidente de la Plataforma Logística, en la que se les explicaba la necesidad de mantener dicho transporte dado que las rutas y horarios de los autobuses urbanos de EMTUSA, no cubrían los horarios de los cambios de turnos del centro, ni las necesidades de los trabajadores.
El gerente informó en la asamblea «de la supresión definitiva de dicho servicio a partir del día 1 de febrero, de las negociaciones que había mantenido con EMTUSA modificando los horarios y rutas ajustándolas supuestamente a las necesidades del personal para llegar al hospital». Y mantuvo su negativa a solicitar un concurso que permita la nueva contratación de dicho transporte cumpliendo la legislación y el acceso a los trabajadores a su puesto de trabajo en tiempo y forma.
Tras sus declaraciones, ante las críticas y reproches de los trabajadores, el gerente abandonó la asamblea sin terminar de escuchar las propuestas de solución que pudieran plantear los mismos, según la junta de personal.
Tras su marcha los trabajadores presentes decidieron, por mayoría, mantener como única solución posible su reivindicación de que continúe el transporte colectivo que viene funcionando desde más de 33 años.