Ser un conferenciante exitoso es uno de los sueños de quienes que se consideran a sí mismos personalidades públicas, capaces de influir en las masas. Se trata de un reto que requiere de muchas habilidades, sobre todo para ser reconocido por los demás como alguien capaz de conducirse sin problemas en los temas de mayor interés.

Actualmente existen muchos conferenciantes famosos españoles que han alcanzado el éxito gracias a su larga trayectoria en sus respectivas áreas. Pero, ¿qué es lo que los diferencia? ¿Cuál es su fórmula para ser tan buenos?

Para ti, que deseas mejorar y ser reconocido como uno de los más exitoso conferenciantes, hemos traído las diez habilidades que todo profesional actual necesita para figurar entre los mejores.

Pasión

Un buen conferenciante se diferencia de los demás porque existe en él una pasión por lo que hace. El reto de salir y hablar frente a muchas personas, pero además de lograr conectar con ellas y transmitirle conocimientos, es parte de la labor. Sin embargo, esto solo se logra cuando se siente un verdadero deseo por cumplirlo. La pasión, entonces, es fundamental.

Conocimiento

Un segundo aspecto tiene que ver con la forma en la que el conferenciante se desenvuelve con el tema del que hablará. El conocimiento es un aspecto esencial.

Tener éxito como conferenciante implica saber siempre muy bien cada palabra, cada definición, cada término pronunciado y, además, contar con conocimiento integral que sirva de base. Este es el motivo por el cual siempre se recomienda hablar temas que el conferenciante maneja a la perfección.

Evita las distracciones

Uno de los principales errores de muchos conferenciantes es el distraerse mientras exponen los temas frente a su público. Para quienes los escuchan esto puede resultar molesto, debido a que están a la espera de un discurso coherente, que tenga un inicio, desenlace y final.

Para alcanzar el éxito es necesario evitar este tipo de problemas.

Contar con un esquema

Una magnífica forma de demostrar que se es organizado en cuanto a discurso es contar con un esquema que sirva de apoyo. Este ayuda a desarrollar las ideas de manera sencilla, sin caer en cavilaciones molestas que puedan sobrellevar al público al aburrimiento.

Ser perceptivo

Todo buen conferenciante es capaz de percibir de su público los distintos matices en cuanto a atención, emoción, compromiso con el tema y expectación ante las próximas palabras de quien habla.

Esta habilidad es muy útil para saber mostrar los puntos clave del discurso cuando más se esperen.

Discurso comunicativo

El discurso de todo conferenciante de éxito debe ser comunicativo, y la comunicación implica una retroalimentación. ¿Qué quiere decir esto? Que es importante no caer en largos monólogos. Buscar la participación de la audiencia es de gran ayuda para captar su atención.

Anécdotas

Las personas aman escuchar anécdotas en todo momento. Forma parte de nuestra naturaleza. Si el conferenciante es capaz de incluir algunas dentro de su discurso, el público se sentirá mucho más interesado en lo que dice.

Comunicación no verbal

Más allá del discurso, un buen conferenciante debe manejar los aspectos básicos de la comunicación no verbal: caminar por el pódium, acercamiento al público, el movimiento de las manos, los altos y bajos en la entonación para hacer énfasis en ideas, etc.

Agregar humor

El humor es una habilidad importante aunque peligrosa. Debe manejarse con cuidado, evitando comentarios que se malinterpreten, y de manera periódica para que no se pierda la seriedad del discurso.

Énfasis en los finales

Las personas suelen recordar siempre los finales de los discursos. El conferenciante exitoso logra que en el suyo la conclusión sea perfecta, al punto de que las personas se sientan motivadas a levantarse a aplaudir.