La Delegación de Huelva de la Asociación Pro Derechos Humanos de Andalucía (Apdha) ha emitido una comunidado en el que exige a las administraciones que tomen medidas de manera urgente, tras el último incendio del pasado sábado en Palos de la Frontera, en un asentamiento chabolista de inmigrantes.
El último incendio declarado en un asentamiento se produjo el pasado sábado entre Palos y Moguer y quedaron calcinadas 30 infraviviendas ubicadas cerca del Paraje Natural Lagunas de Palos.
«La dificultad para acceder a la regularización de su situación administrativa en España, los cuantiosos obstáculos con los que se encuentran para acceder a un empleo, la escasez de viviendas que existe en algunos municipios, la reticencia de las personas propietarias a alquilar una vivienda a migrantes y/o el elevado precio de los alquileres» son algunos de los motivos por los que existen varios asentamientos en la provincia de Huelva.
Apdha llama la atención sobre «la asiduidad con la que se producen los incendios en los diferentes asentamientos. Sin duda el resultado de sufrir un incendio puede llegar a ser gravísimo para cualquier persona y situación pero, las consecuencias aumentan y se agravan en el caso de las personas que habitan en los asentamientos, debido a las pésimas condiciones en las que viven».
La asociación entiende que es de vital importancia que se «arbitren medidas de fondo, para la erradicación del chabolismo y que se presten, soluciones efectivas y duraderas y no medidas superficiales que palíen la situación de manera transitoria».
Apdha considera necesaria la creación de un plan multidisciplinar que «afronte esta grave situación desde una perspectiva amplia, teniendo en cuenta todas las dificultades a las que esta población tiene que hacer frente. Las administraciones serán las responsables de la puesta en marcha de este plan, diseñado y apoyado desde el Foro provincial de la inmigración. En este plan se incluirá la puesta en marcha de una red de recursos en todas las zonas agrícolas que permitan a los trabajadores temporeros no verse obligados a vivir en asentamientos que no disponen de ningún tipo de servicios mínimos».
Además, la asociación ha solicitado «reforzar y establecer cauces sencillos para garantizar que estas personas puedan ejercer su derecho a la atención sanitaria (física y mental), derecho a la inserción laboral activa y real, derecho a un alojamiento digno y derecho a disfrutar de un servicio de orientación jurídico-legal».
Por otra parte, Apdeha entiende que hay que «garantizar el empadronamiento de todas estas personas en las localidades en las que viven, tal y como establece la Ley, porque no poder empadronarse dificulta el ejercicio de muchos otros derechos».
La última de las propuesta de la asociación es la de crear un programa de integración con la población local que incida en la sensibilización y concienciación social, puesto que «sólo así se podrá evitar la exclusión y criminalización de la población inmigrante y los peligrosos conatos de racismo que se están produciendo, y también con la población asentada, sensibilizando, mediando, trabajando con ellos otras opciones de vida fuera de la chabola».