El partido ante el Atlético Sanluqueño fue bastante duro y varios futbolistas del Recreativo de Huelva salieron tocados y con molestias musculares. Es el caso de Alberto Quiles, que tuvo que pedir el cambio en la segunda parte con una inflamación en la rodilla, pendiente de las pruebas médicas y Carlos Martínez, con un golpe en el tobillo. Irizo, Quique Rivero y Víctor Barroso, que están ya en la recta final de sus respectivas lesiones, deberían, si no hay contratiempo, volver esta semana a entrenar con el grupo y todo indica a que estarán disponibles para el partido ante la Balompédica Linense.