La parlamentaria de Adelante Andalucía por Huelva, María Gracia González, ha registrado este miércoles en el Parlamento andaluz una pregunta acerca de las medidas que va a adoptar la Consejería de Salud y Familias sobre la situación de colapso ante el coronavirus que está sufriendo el personal de Salud Responde, empleados de la empresa concesionaria Ilunnion.
El tema se tratará con el consejero de Salud y Familias, Jesús Aguirre, al que María Gracia González pedirá soluciones para una plantilla que es la que atiende las llamadas de los ciudadanos para cuestiones relacionadas con la salud y los servicios sanitarios en Andalucía. En este sentido, debido a la crisis mundial por el coronavirus, la plantilla de Salud Responde “está recibiendo un aluvión de llamadas de personas que quieren información acerca de este virus”.
Así, según han expresado los trabajadores “uno de los principales problemas es la falta de formación a la plantilla” acerca del tema, que dicen que se realiza “en algo más de diez minutos”. Además, debido al carácter cambiante de la situación “se va actualizando a golpe de correos electrónicos e instrucciones verbales”. Todo ello mientras tienen que atender a los usuarios, lo que genera “una gran inseguridad en la plantilla con respecto al mensaje que deben facilitar a la ciudadanía”, tal y como han expresado desde el sindicato CGT.
Por todas estas cuestiones, la parlamentaria de Adelante va a exigir respuestas –que pasan por la contratación de más personal entre otras– a un problema que no es nuevo y que se ha agravado con la aparición de casos de coronavirus en Andalucía. “El personal de estos servicios lleva sufriendo desde hace muchos años un profundo deterioro de sus condiciones laborales”, ha explicado González, que afirma que “se han abierto numerosos expedientes por la Inspección de Trabajo”, además de producirse “numerosos incumplimientos de las empresas concesionarias”.
En la actualidad, “los niveles de estrés que padece la plantilla son insoportables”, debido a que “no hay suficientes personas en sala durante los turnos para atender tanta demanda de llamadas”, tal y como también confirma CGT. Así, señalan que “hay turnos completos de ocho horas con llamadas en cola de más de un minuto no pudiendo ni siquiera beber agua”. Por todo ello, la plantilla, aunque no es su deseo, “no puede dar un servicio de calidad”, ya que necesita “herramientas de las que no dispone”, ha subrayado González.
Se hace urgente y necesario, por tanto, que “se busquen soluciones centradas en aumentar la plantilla de trabajadores y trabajadoras”, así como que reciban “una formación adecuada a las circunstancias”, que se traducirá en un servicio de calidad a los usuarios.
La parlamentaria onubense también ha apuntado que esta situación no deja de ser “consecuencia de contratar empresas privadas que miran por su interés particular”, para sacar la “máxima rentabilidad a costa de la salud y las condiciones laborales del personal” de la misma.