Auxiliares de Ayuda a Domicilio de la empresa Macrosad que prestan servicio en las localidades andevaleñas de Villanueva de los Castillejos, El Almendro, Puebla de Guzmán, Alosno, San Silvestre de Guzmás y Villablanca han denunciado a HuelvaYa su “descontento e indignación” ante las condiciones en las que se ven obligadas a realizar su trabajo en plena crisis del coronavirus.
“Desde que el gobierno implantó el estado de alarma el pasado 14 de marzo estamos realizando nuestro trabajo sin EPI, poniendo nuestra salud y la de los usuarios en riesgo. Tan solo disponemos de guantes y un delantal o mandil que nos proporcionó la empresa a principios de febrero y nos sentimos totalmente desprotegidas ante la alerta sanitaria que estamos atravesando”, aseguran las trabajadoras.
Asimismo, las auxiliares exponen que “cuando llegamos a los domicilios tenemos que atender a los usuarios, la mayoría personas ancianas que tenemos que asear, y es imposible mantener el metro y medio de distancia que distan las medidas de seguridad y todo sin equipos de protección individual, simplemente con unos guantes”.
“Queremos seguir desarrollando nuestro trabajo, no nos negamos en ningún momento a ello y por eso entendemos que dada la situación lo adecuado sería atender a aquellos usuarios que se encuentran solos o que verdaderamente lo necesiten, por ello le pedimos a la Diputación Provincial de Huelva que implante los servicios mínimos, como ya han sido implantados en otras localidades de la provincia hasta que dure el estado de alarma”.
“Esperamos que el esfuerzo de las auxiliares de ayuda a domicilio en estos duros momentos sirva de algo y podamos trabajar con seguridad”, finalizan.