Más de doscientas personas participaron ayer en Nerva en la concentración-marcha convocada para mostrar la unanimidad de la ciudadanía en el rechazo a que sea ampliada la capacidad y las actividades del vertedero, que ya en 2012 fue declarado oficialmente colmatado, según se informa desde las organizaciones convocantes del acto.
Durante la acción participaron personalidades de prestigio de la cultura y el arte local que pusieron voz y música a textos y poesías que ensalzan la forma de vida, la cordialidad y la cultura locales que han caracterizado siempre a Nerva.
«Ayer, a pesar del calor, la covid-19 y las fechas vacacionales, más de doscientas personas clamaron de forma unánime ¡Cierre del vertedero, ya! en Nerva. Las 23 entidades convocantes señalan de que cada vez son más los ciudadanos y ciudadanas que se suman a las acciones que se convocan para mostrar el rechazo a la ampliación del vertedero», explican los organizadores.
Tras la bienvenida en la plaza de El Ventoso de la mano de Manuel Aragón Román, tuvo lugar un acto de lo que siempre ha sido seña de identidad de Nerva, el arte y la cultura. Dieron lectura a poesía y prosa los poetas Mario Rodríquez y Pedro Ferreira y la poetisa Rosa María Fernández Díaz. Pusieron el broche que dio inicio a la marcha los músicos Carlos Llanes y José Luis Romero de la Osa (Pío).
Y es que en Nerva hay consenso: el equipo de Gobierno del Ayuntamiento y la oposición, las organizaciones ciudadanas locales de diversa índole y otros grupos de esta comarca y de otras de la provincia, todas ellas solicitan el cierre inmediato de las instalaciones y la recolocación de sus trabajadores en la implementación del plan de restauración y mantenimiento de la zona.
Así lo expresaba el comunicado leído por los artistas locales José Gregorio Prieto y Javier Domínguez en la misma puerta del vertedero que gestiona DSM-Ditecsa, donde llegó la comitiva siguiendo estrictamente las medidas de distanciamiento y seguridad que requiere la situación de pandemia. Además de mencionar el incumplimiento por parte de la empresa durante 25 años de los compromisos adquiridos con el contrato de puesta en funcionamiento, se recordaron los numerosos episodios que evidencian de forma continuada la mala gestión empresarial, materializada entre otros en olores, polvaredas, incendios, vertidos al río Tinto o accidentes de los camiones en carretera, produciendo vertidos de los residuos transportados a granel.
Se trata del vertedero industrial más grande de Europa, donde han llegado residuos de lugares insospechados de la geografía planetaria, que, a pesar de que en 2012 la Junta de Andalucía reconoció que estaba colmatado, ha seguido funcionando con un permiso de recrecimiento concedido. Y, aún sin haber realizado ese recrecimiento, la empresa DSM-Ditecsa solicita ahora una nueva ampliación del volumen y las actividades empresariales con los residuos. Las nuevas actividades del proyecto de DSM-Ditecsa prevén el incremento de las emisiones al aire con una planta de quema de residuos; de los malos olores, con unos vasos para descomposición y secado de residuos orgánicos de animales y de otra índole; de vertido al río Tinto con una planta para tratar líquidos industriales residuales. Estas propuestas, encuentran el rechazo ciudadano y el de personas investigadoras y científicas de prestigio e independientes, que desaconsejan su autorización por suponer riesgos imprevisibles e inasumibles, como descorrimiento de laderas, un gran incendio o la transformación del macrovertedero en un supermercado de residuos sin control.
Las 23 entidades convocantes se muestran satisfechas con el incremento de participación, en especial, por las personas de Nerva que, tras tantos años de no ser escuchadas vuelven a salir, a pedir, a exigir que sean tomadas en cuenta a la hora de diseñar actividades que condicionarán su futuro, que plantean perpetuar su situación de falta de inversión y de falta de apoyo para poner en valor los recursos de esta zona, en especial, el Bien de Interés Cultural del enclave donde está situado el vertedero, donde hay abundante patrimonio minero que sería necesario poner en valor, un camping cerrado desde hace años por encontrarse el vertedero a los pies del monte donde se encuentra, o el río Tinto, cuya declaración como Patrimonio de la Humanidad por la Unesco, potencial fuente de inversión y recursos por su unicidad y excepcionalidad no prosperará debido al vertedero.
“Estamos en un punto de inflexión óptimo para dar un giro al futuro de Nerva y la Comarca -afirman las entidades de Nerva y la comarca-, por lo que seguiremos durante el mes de agosto informando a los y las ediles de la zona, así como a la población de la Cuenca minera”. También tienen previsto proponer un encuentro con el sector empresarial del Polo Químico de Huelva, uno de los beneficiarios iniciales del vertedero en 1995, junto con la industria de Sevilla y Cádiz, las cuales, a día de hoy, podrían haber seguido utilizando esta instalación si no se hubiera desviado continuamente su función, malogrado su gestión, autorizado la entrada de residuos de casi cualquier categoría y ajenos al objetivo de su creación y colmatado. Después del periodo estival se retomará la actividad ciudadana en otoño para pedir a la Junta de Andalucía su pronunciamiento final en favor de la clausura definitiva e inmediata en términos empresariales, “porque por supuesto no puede ser de un día para otro”, con una propuesta de gestión alternativa , que libere a la zona de propuestas que permitan a Nerva y la Cuenca planificar e impulsar proyectos que atraigan inversores y promueva la creación de empleo al margen del sector de los residuos industriales, en el marco de la vocación cultural, artística y patrimonial de Nerva y la comarca.