Recurrir a los servicios de una pitonisa ha sido para muchos, una buena alternativa. A la hora de encontrar soluciones y construir una guía ante un problema específico en su vida. Aunque en realidad, las habilidades de la adivina van mucho más allá de predecir o pronosticar tu destino.
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También conocida como vidente, hechicera o adivina. La pitonisa es a quien se le confieren dotes especiales para pronosticar el futuro. Debido a la fama de su labor en el antiguo Oráculo de Delfos, donde se le brindaba honores al Dios Apolo.
En la actualidad, la pitonisa se mantiene vigente entre los buscadores de la verdad. Y aquellos que persiguen dar claridad a su futuro. Y esta, sirviéndose de sus dotes esotéricos, es capaz de canalizar la energía del oráculo. Para vislumbrar así lo que está por venir para quien consulta.
No son simples pronósticos o posibilidades, ya que esta hechicera no interpreta ni evalúa. Ella sirve de canal para hacer entrega de un mensaje proveniente de la energía divina que es consultada.
Más allá de la persona con estas cualidades especiales, se habla del espíritu de la pitonisa. Entendiéndose como la virtud que puede recaer sobre cualquier persona; hombre o mujer. Dispuestas en espíritu y con los dones de videncia para expresar los más ciertos designios de los dioses.
Reconocida su existencia, incluso en el Antiguo Testamento, ha logrado mantenerse en vigor. Después del importante auge en la cultura griega y su posterior debacle; aún se mantiene en vigencia. Y desde los individuos más comunes hasta las altas potestades recurren a sus servicios.
Origen de la pitonisa
La palabra pitonisa o pitia, proviene del vocablo Pytho. Hace referencia a la mitológica serpiente que venciera al dios Apolo. El cual, según la mitología griega, tomó forma de Delfín y condujo a sus hombres a derrotar a Pytho en su propia isla. Tomando posesión de la misma y fundando el santuario del Oráculo de Delfos.
Dentro de la jerarquía del Oráculo de Delfo se conoce la labor de la pitonisa como la mensajera premonitoria. Sentada sobre un trípode en un sitio sagrado del templo, se escogía a una mujer pura, virgen y sin manchas.
Aunque se conoce que podrían encontrarse hasta tres pitonisas en el santuario del oráculo. Posteriormente se instituyó la presencia de solo una mujer, la cual debía tener al menos 50 años. Quedaba entonces encargada de esa labor por el resto de su vida.
La figura de la pitonisa es representada como una mujer. En la biblia la refieren como una hechicera y en algunos casos le atribuyen una figura espectral. Con dones de mediación adivinatoria, pero relacionada con profecías poco alentadoras.
Sibila fue la primera pitonisa del Oráculo de Delfos. Y su nombre se usó en algunas culturas para referirse a las pitonisas en general. La imagen de las pitonisas de hoy se ha normalizado y su presencia se asume con naturalidad. Ya que, a fin de cuentas, lo bueno o lo malo del futuro solo está dispuesto por la forma en la que se asume.
Los consultantes han sido guiados a entender que conocer el futuro no es motivo de temor. Sino una ventaja para afrontarlo con mejor disposición. Entonces es posible, con la ayuda de la pitonisa, tomar decisiones acordes a la realidad que se avecina.
¿Qué hace una pitonisa?
El oficio de vidente en el Oráculo de Delfos se ejercía con mística. Bajo una estricta jerarquía atendía a los consultantes que acudían al santuario. Una vez canalizada la energía adivinadora, respondía a sus preguntas a viva voz. Mientras tanto, un sacerdote del templo escribía el mensaje para el interesado.
Hoy día, la mediación de la pitonisa deja claro a quién consulta que no es ella quién adivina. Sino la energía del oráculo que se manifiesta a través de sus dones y sus mancias. El tarot, las runas, la bola de cristal o la canalización de seres de luz; son algunos de los canales usados por la adivina.
Aún así, las mejores pitonisas son capaces de establecer una conexión genuina. Haciendo uso únicamente del poder de sus dones naturales. Sin embargo, es una práctica que requiere cultivar y perfeccionar las virtudes adivinatorias que ha recibido. Y debe entonces consagrarse para este fin, confiriéndole a la mística el grado de sacerdotisa.
La pitonisa es capaz de visualizar el futuro. Brinda un panorama completo de las posibilidades y alternativas de acción. Ofrecer consejo sabio o advertir de alguna contrariedad. Pronosticar el futuro según la lectura que la energía astral que la guía tenga para destinado para el consultante.
Sus dones están destinados a predecir lo que vendrá. Aunque esto no la limita a percibir los mensajes sobre el presente. Y esclarecer los enigmas del pasado en procura del bienestar de quien consulta. Busca encaminarle hacia senderos conocidos y garantizar la certeza de sus decisiones.
¿Qué es el oráculo y su función?
Por lo general, se establece un santuario en el cual se recibe el oráculo. Un templo en honor a una deidad y dentro del cual la pitonisa atiende. Entre los más conocidos se encuentran el Oráculo de Delfos, Dídima, de Olimpia y el oráculo de Sibila.
El oráculo no es medio, sino el mensaje. Es la forma natural y simbólica de comunicación. Esta usa la energía del universo, los dioses y los astros para hacerse entender en el mundo físico.
Entender este mensaje está entre las cualidades de aquellos quienes han heredado y cultivado los dones místicos. Por tanto, disponen de sus dotes en beneficio de otros. Haciendo llegar hasta ellos las respuestas a sus preguntas y lo que los dioses tienen que decir.
En Grecia, la canalización del oráculo se realizaba el día 7 de cada mes, en honor a Apolo. Pero esto ocurría solo durante 9 veces cada año. Ya que se suponía que durante una temporada Apolo estaba ausente y no era posible que emitiera sus mensajes.
Entonces, era la pitonisa quien atendía las inquietudes de los consultantes a través de su mediación. Como canal por excelencia para el oráculo. Desde tiempos remotos se confería a la pitia esta labor. Para lo cual debía sumirse en un estado idóneo de trance. Donde su cuerpo fuera capaz de canalizar la enorme energía de esta conexión mística.
Era asistida y protegida por los sacerdotes del santuario. Quienes velaban la purificación de quien se acercará a la mística. Colocada al fondo del templo, llegar hasta ella era estar en un espacio sagrado. Por tanto, solamente cuando se manifestaba la presencia del oráculo, era posible presentarse ante ella.
¿Cómo consulta una pitonisa?
En la antigüedad, se inducía a la pitonisa a un trance. Se cree que a través de la aspiración de los gases del centro de la tierra. Que simbolizaba el aliento del mismo dios Apolo, o el consumo de hojas con poderes psicotrópicos.
En muchos casos, la respuesta obtenida solo era entendible por los sacerdotes del templo. Otras alegorías, afirman la entrega del recado a viva voz para quien consultaba sus poderes. Sacerdotes, reyes y magistrados recurrían a sus servicios. Solo para obtener el visto bueno antes de proceder.
Consultar a una pitonisa hoy día es sin duda mucho más sencillo. Hay diferentes medios de consulta disponibles a través de la tecnología. Lo que hace posible resolver tus inquietudes desde la comodidad de tu hogar.
Aún así, la conexión esotérica que establece una pitonisa verdadera continúa siendo una virtud. Además de disponer de otros medios. Persigue alinear la necesidad del consultante con el mensaje destinado para su futuro. Crea un ambiente de armonía y confianza para que la energía fluya sin problemas.
En algunos casos, la adivina solo requerirá saber el nombre de quien consulta. En otras; ni siquiera eso será necesario. Ya que en la consulta se establece la conexión espiritual con quien llama y el oráculo así lo reconoce.
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