La Guardia Civil ha investigado a tres personas por un supuesto delito relativo a la protección de la flora, fauna y animales domésticos.
Estas actuaciones han sido llevadas a cabo por agentes especialistas del Equipo de Investigación del Servicio de Protección de la Naturaleza de la Guardia Civil (SEPRONA), a raíz de haber tenido conocimiento de la descarga de atún rojo desde embarcaciones de recreo en el puerto deportivo de Mazagón en fechas en las que se encontraba en vigor la Resolución de 22 de junio de 2020, de la Dirección General de Ordenación Pesquera y Acuicultura, por la que se prohibía temporalmente la pesca, tenencia a bordo y desembarque de ejemplares de atún rojo (Thunnus thynnus) para la modalidad de pesca deportiva y recreativa.
El atún rojo atlántico es la base de una de las pesquerías más lucrativas del mundo. Los ejemplares de medio y de gran tamaño están muy perseguidos por el mercado japonés, donde se consumen como sushi y sashimi. Esta importancia comercial está llevando a la especie a la sobrepesca.
EL CICAA (Comisión Internacional para la Conservación del Atún Atlántico, que vela por los intereses de estas especies en peligro, afirmó recientemente que «el stock de atún rojo ha descendido dramáticamente». Asimismo, en 2010, los ministros europeos defendieron que se ponga un límite internacional a las capturas, realizando acciones para terminar con esta situación tan drástica y declarándolo en peligro de extinción.
Desde el SEPRONA subrayan la «indispensable colaboración prestada desde el Instituto de Investigación y Formación Agraria y Pesquera de la Consejería de Agricultura, Ganadería, Pesca y Desarrollo Sostenible de la Junta de Andalucía (IFAPA)», cuyos investigadores realizaron informes periciales de identificación taxonómica, en base al conocimiento de la especie y a las características morfológicas.
Por ello tras investigaciones llevadas a cabo, los agentes pudieron constatar la descarga, desde embarcaciones de recreo, de un total de cuatro atunes de grandes dimensiones, entre 150 y 200 kg cada uno, procediendo a tomar declaración en calidad de investigados a los tres patrones de las embarcaciones por su posible participación en un supuesto delito relativo a la protección de la flora, fauna y animales domésticos.
Las diligencias instruidas fueron remitidas al Juzgado de Guardia de Moguer.