Según datos del Instituto Nacional de Estadística (INE) alrededor del 17% de la población española sufre dolor crónico, definido como aquel que perdura más de tres meses y que debido a su prolongación en el tiempo afecta al paciente en múltiples áreas de su vida, como el trabajo, la familia y el ocio.
Con la clara finalidad de mejorar la calidad de vida de estos pacientes, Quironsalud Huelva pone en marcha la Unidad del Dolor liderada por el especialista en anestesiología y reanimación, Luis Fernández López.
En palabras del doctor Fernández ‘en la nueva unidad abordamos el tratamiento del paciente de manera integral buscando un alivio físico de su dolor, apoyando el proceso de rehabilitación si lo precisa, y por supuesto buscando impactar de manera positiva en su calidad de vida tanto a nivel físico como emocional’.
La Unidad del Dolor trata múltiples procesos y dolencias crónicas. Principalmente aquellos que atañen a la columna vertebral a nivel óseo, neurológico y muscular, con o sin antecedentes de cirugía; así como artrosis, procesos degenerativos o inflamatorios a nivel de rodilla, cadera y hombro. Las migrañas y cefaleas y la fibromialgia también son tratados con el ánimo de identificar el origen del dolor y mejorar la situación del paciente.
La mayoría de los pacientes atendidos en la unidad detalla el Dr. Fernández ‘suelen venir derivados por un especialista del que aporta un diagnóstico médico o postquirúrgico, sumado a un conjunto de pruebas complementarias. Es fundamental la presencia de un diagnóstico previo a cualquier tratamiento en nuestra unidad’.
En cuanto al tratamiento, el anestesista añade que ‘en la Unidad del Dolor ofrecemos alternativas terapéuticas específicas y personalizadas con el objetivo de mejorar la vida de nuestros pacientes’ como son los tratamientos farmacológicos, la ozonoterapia médica, acupuntura médica, infiltraciones, técnicas intradiscales en columna, radiofrecuencia de raíces y facetas en columna o nervio periférico y toxina botulínica.
Concluye el doctor Fernández, ‘que el paciente con dolor crónico, dependiendo de su diagnóstico y situación, mejorará la dolencia trabajando la condición física con el aumento de esta a través de ejercicios y rutinas de estiramientos y siguiendo unas correctas pautas nutricionales; sin abandonar el cuidado psicológico’.